SHANGAY ⇒ ¿Por qué pasas ahora más tiempo en Latinoamérica que en España?
ANA TORROJA ⇒ ¡Porque el trabajo está allí! El público latinoamericano me hace sentir muy bien desde hace mucho. El mexicano, que es el que más conozco, porque llevo yendo treinta y pico años, es muy fiel. Tiene un amor de verdad por los artistas que han admirado siempre, independientemente de su edad, y siguen llenando sus conciertos. Les da igual si están más gordos, más viejos o incluso si cantan peor [risas]. España en ese sentido es un poquito más infiel.
SHANGAY ⇒ ¿Confiabas en que la vida de Conexión se alargara tanto?
ANA TORROJA ⇒ No. Porque hoy las cosas van muy rápidas. Pero al incluir tantos éxitos, y como la gente quiere seguir escuchando determinadas canciones, por mucho que se las hayas cantado, era en cierto modo garantía de que iba a salir bien. Ya no hago planes a largo plazo, hago lo que me toca cada día. Si hay menos trabajo, hago otras cosas, no me estreso por eso, sé que las cosas que salen son las que tienen que salir. Siempre he creído en el destino.
SHANGAY ⇒ ¿Te cansas de interpretar alguno de tus clásicos, sean de Mecano o en solitario?
ANA TORROJA ⇒ ¡No! Cuando me canso, los aparto y los dejo descansar. Y las que siempre hago porque sé que el público las quiere escuchar, las voy transformando para que a mí también me suenen diferentes. Renovarse o morir.
SHANGAY ⇒ ¿Te sorprende cómo va cambiando tu voz?
ANA TORROJA ⇒ Sí, y me gusta. La gente que me lleva escuchando muchos años me dice que estoy cantando mejor que nunca. Creo que mi voz tiene ahora más matices y más rango, y una conoce mejor sus herramientas y sabe de qué manera utilizarlas.
SHANGAY ⇒ De cara a tu último proyecto, confesaste que habías vuelto a escuchar los discos de Mecano, algo nada habitual en ti. ¿Por qué?
ANA TORROJA ⇒ Para reconciliarme con el pasado y para reencontrarme con canciones que estaban en el baúl de los recuerdos, como JC, Hermano sol, hermana luna… Canciones bellísimas, algunas muy adelantadas a su tiempo. Como empecé a escribir mi autobiografía, me apetecía reencontrarme con toda esa música, porque las canciones me recuerdan cosas; al fin y al cabo, son la banda sonora de mi vida.
SHANGAY ⇒ ¿Para cuándo ese libro?
ANA TORROJA ⇒ No lo sé, porque lo tengo parado. Será, lógicamente, una visión muy personal, cargada de anécdotas que la gente no conoce. Que nadie espere una versión extendida de una entrada de la Wikipedia.
SHANGAY ⇒ ¿Tienes buena memoria?
ANA TORROJA ⇒ No, fatal. Por eso tengo que escuchar y ver cosas. Me meto en Internet y veo entrevistas, por ejemplo. A veces pienso “no hablaba tan mal para ser tan joven” [risas].
SHANGAY ⇒ ¿Nuevos proyectos musicales a la vista?
ANA TORROJA ⇒ Sí. Hay un proyecto, que creo que os va a gustar mucho. Tiene que ver con la banda sonora de mi vida, pero no la que he cantado, sino la que yo escuchaba. Todavía está muy verde, así que prefiero no adelantar más por ahora.
SHANGAY ⇒ ¿Por qué espacias cada vez más tus discos con canciones originales?
ANA TORROJA ⇒ Porque se da así. A mí lo que más me gusta es grabar canciones nuevas, pero hay que saber dónde estás y cómo está la industria. Por eso creo que, hoy por hoy, el otro proyecto que estoy preparando va a ser más potente, y me puede colocar en el sitio ideal para hacer otro disco original.
“Es muy especial ver que todo el mundo disfruta y está orgulloso de la diversidad, que yo siempre he defendido como lo más natural”
SHANGAY ⇒ Con María León liaste una gorda cuando os disteis un beso en un concierto tras cantar Mujer contra mujer, lo cual indica lo necesario que sigue siendo que la cantes…
ANA TORROJA ⇒ Pues sí. Porque he hecho conciertos para empresas privadas en los que antes de empezar me decían por lo bajinis “si viene María como invitada, no os deis el beso…”. Y no es que nosotras nos demos besos todos los días, aquel fue un día especial y nos pareció perfecto hacerlo. Cuando se montó tanto lío no paré de repetir en las entrevistas que ojalá llegue el día en que un beso entre dos mujeres no sea noticia. Por suerte, el mundo cada vez se abre más, y el Orgullo en Madrid, por ejemplo, es una fiesta gigante a la que viene gente de toda España, Europa y el mundo.
SHANGAY ⇒ Este año vuelves a participar en el Orgullo de Madrid. ¿Qué supone de especial participar en esta celebración?
ANA TORROJA ⇒ Lo especial es ver que cada vez es una fiesta más grande, y para todos, no solo homosexuales. Ver que todo el mundo disfruta y está orgulloso de la diversidad, que yo siempre he defendido como lo más natural…
SHANGAY ⇒ ¿De qué te sientes más orgullosa a día de hoy?
ANA TORROJA ⇒ De seguir haciendo lo que me apasiona, de mantenerme y de mi hija. Que con sus once años me pone al día de la música de hoy, aunque a mí casi todo me suena igual. Pero tiene muy buen gusto. No sé si eso se hereda [risas].
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