Continua la polémica de la ‘sangre gay’. Hace unos días os hablábamos de la sentencia del Tribunal de Justicia Europeo frente a un caso francés. Una resolución que expresaba que la prohibición de donar sangre por parte de hombres homosexuales puede estar justificada, y que siempre que se demuestren científicamente los riesgos y no haya otras medidas menos coercitivas, apoyará a cualquier estado miembro en la exclusión permanente de este ‘grupo de riesgo’. Os lo ampliábamos en este artículo: Prohibido donar sangre si eres gay.
Una sentencia que suscito la indignación de millones de personas en todo el mundo. Aquí en España bajo el hashtag #MiSangreEsLaMismaQueLaVuestra. Algo que os ampliábamos en este artículo: El debate de la sangre gay.
Ahora, tras las protestas y con la pelota en su tejado, es Francia la que debe determinar si aplicar o no dicha restricción, y se ha pronunciado. El Gobierno francés confirma su compromiso a revisar los cuestionarios de donación de sangre e intentar eliminar la discriminación que puedan plantear estas cuestiones a los donantes homosexuales, siempre sin perder las garantías para obtener extracciones seguras.
Unas declaraciones esperanzadoras pero que poco dicen respecto al hecho de continuar o no con las prohibiciones a los homosexuales. Los cuestionarios actuales niegan de manera permanente las donaciones de hombres que han tenido relaciones sexuales con otros hombres, algo que se puede ver en este vídeo/campaña para recoger firmas contra esta prohibición.
También conocíamos la postura de la Ministra de Sanidad francesa, Marisol Touraine, que ha anunciado que se reunirá en mayo con los actores implicados en el litigio y se decidirá si estos cuestionarios deben o no ser modificados. Eso sí, confirma su predisposición a poner fin a la discriminación que prohíbe a los homosexuales donar sangre por el simple hecho de ser homosexuales.
En España, son numerosas las organizaciones, entidades y políticos que han mostrado públicamente su rechazo a la sentencia. Una resolución que da lugar a subterfugios y pretextos con los que discriminar a la población LGTB, además de incrementar el estigma social en el que los homosexuales parecen estar bajo una injustificada sospecha permanente.
Por ejemplo, COGAM ha declarado que la sentencia «no solo avala y justifica la discriminación de personas homosexuales y bisexuales, sino que estigmatiza fuertemente a esta población».
Comisiones Obreras la tacha de «una auténtica aberración que va en contra de los derechos de las personas LGTB, ya que, entre otras cosas, da por hecho que los hombres homosexuales realizan prácticas de riesgo».
Cristina Cifuentes, candidata a la Comunidad de Madrid por el PP, ha declarado que »la orientación sexual no puede ser bajo ningún concepto un motivo de discriminación».
Pedro Zerolo, secretario de Movimientos Sociales del PSOE, opina que «la Unión Europea y sus instituciones deben garantizar que las exclusiones en la donación de sangre se basan en las prácticas de riesgo y no en la orientación sexual de las personas».
En cuanto a nuestro Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, ha asegurado que su postura seguirá siendo la de no evaluar a los donantes de sangre en función de su orientación sexual sino en relación al riesgo individual de cada persona a la hora de transmitir algún de tipo de enfermedad.
La subdirectora general de Promoción de la Salud y Epidemiología, Elena Andradas, también señalaba esta sentencia como discriminatoria e injustificada.
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