Iba a ser un día más en el número 19 de la Avenida de la Condomina (Alicante), pero cualquier parecido con la normalidad suena a pura coincidencia. Un vecino descubría el cuerpo de una mujer transexual de 41 años y origen brasileño sin vida en el ascensor a media mañana del pasado martes.
Su cuerpo, tal y como cuenta Cáscara Amarga, presentaba hematomas en cuello y cabeza sin heridas de bala o arma blanca, fue trasladado al Instituto de Medicina Legal para ser sometido a un examen forense que aclare una muerte que reúne un mar de incógnitas.
Una de las hipótesis que maneja el diario El País apunta a que el fallecimiento de la víctima, de visita en el edificio, podría ser fruto de una fiesta que se les fue de las manos a dos turistas franceses de 32 y 21 años. La policía iniciaba así una investigación bajo lo que consideraron un homicidio dados los indicios. Además, los sospechosos estuvieron recluidos en su casa seis horas sin querer abrir la puerta, y solo se pudo acceder a ella cuando lo autorizaba un juez bien entrada la tarde.
Ahora se manejan dos escenarios: la contratación de la mujer para prestar algún tipo de servicio sexual o que el trío se conociese por la noche en algún local de intercambio de parejas o club de alterne, muy frecuentes por la zona. Tampoco se descarta que los hechos se desencadenasen tras descubrir que la mujer era transexual. Los sospechosos pasarán a disposición judicial próximamente.
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