Hoy es Florida, y toda la zona del Caribe. Hace unas semanas fue la ciudad de Texas. Los huracanes Harvey e Irma, dos de los más poderosos y dañinos que se han formado hasta ahora han causado estragos. Desgraciadamente, esto no termina aquí, ya que viene en camino el huracán José, que parece que también será devastador.
La comunidad científica no tiene duda de que el cambio climático es el causante de la formación de estos ciclones tropicales, pero algunos tienen otras teorías de por qué la naturaleza nos envía estas catástrofes. Y sí, es tan increíble como cierto. Varios líderes evangélicos se atreven a afirmar que la culpa del huracán Irma la tiene la comunidad LGTB. El pastor evangélico Kevin Swanson ha asegurado en su programa de radio que se trata de castigos divinos por el horrible pecado de “haber escogido a un alcalde muy pro homosexual’’. Lo tiene clarísimo. “Ese es el mensaje que el Señor Jesucristo está enviando a casa ahora en América. Si reparan sus casas en Houston después de un huracán, será inútil’’.
No es la primera vez que alguien culpa a la comunidad LGTB de ser responsable de una catástrofe de este tipo, ya que la periodista Ann Coultier se atrevió a insinuar que los gays tenían más culpa del huracán Harvey que el propio cambio climático.
Una periodista asegura que el Huracán Harvey ocurrió porque Texas tiene un alcalde gay
El pastor evangélico defiende y predica un mensaje contundente: exige la muerte de todas las personas LGTB. Parece que al señor Kevin se le ha olvidado del mandamiento que invita a amar al prójimo como a ti mismo. Pero tranquilos, que hay solución, porque el pastor defiende que “todos tienen la oportunidad de arrepentirse”.
Parece que la parte de la comunidad evangélica ha decidido iniciar una cruzada contra la comunidad LGTB, ya que, recientemente, otro líder evangélico, el pastor Soto, se atrevió a hacer esto con la bandera gay en un programa de televisión en directo.
Si quieres saber la burrada que hizo este pastor en TV con la bandera LGTB, sigue leyendo
En esta ocasión, el protagonista de nuestra historia es un pastor evangélico chileno que se atrevió a utilizar la bandera de la comunidad LGTB como alfombra tachándola de “trapo de inmundicia”.
El pastor Soto, con el teatrillo bien preparado de casa, sacó la bandera gay del bolsillo de la chaqueta y la extendió en el suelo para después pisarla, y dijo que la utiliza como alfombra muy a menudo. A este hecho se suma que el presentador de dicho programa es abiertamente homosexual e intentó que el pastor rectificara su actitud.
Pero ni mucho menos, el pastor Soto defendió que esa bandera no tenía ningún nombre inscrito, sino que simplemente era simplemente un trapo que reflejaba la campaña que la comunidad evangélica chilena está haciendo en contra de los políticos Rolando Jiménez y Luis Larraín por sus intentos de normalizar y apoyar a las parejas homosexuales.
Finalmente, y como era de esperar, tanto el presentador como la dirección del programa no pudieron consentir tal atropello a la comunidad LGTB y prefirieron prescindir de la entrevista y expulsar al pastor Soto del plató.
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