La escala de Kinsey fue creada por el biólogo Alfred Kinsey, y establece siete diferentes grados de comportamientos sexuales, o lo que sería lo mismob siete orientaciones sexuales.
Kinsey considera que las divisiones de orientaciones sexuales actuales (herosexual, bisexual y gay) se quedan cortas dentro de la realidad en la que vivimos.
Su escala dividida en 7 clasificaciones supone una graduación de las personas desde lo más heterosexual a lo más homosexual:
0. Exclusivamente heterosexual. El hetero inquebrantable con el que nada tenemos que hacer, no caerá esa breva.
1. Predominantemente heterosexual pero accidentalmente gay. Lo que conocemos por gayfriendly. No tiene intenciones de mantener relaciones con su propio sexo, pero podría suceder a lo largo de su vida como una experiencia.
2.Heterosexual con predominancia homosexual. Lo que llamamos hetero curioso, o gay reprimido. Dícese del amigo que dice ser heterosexual y tiene novia, pero se pasa la vida rodeado de gays, nos calienta a todos los amigos gays, y acaba liándose o acostándose con alguno de nosotros debido a los efectos del alcohol.
3. Bisexual. Heterosexual y homosexual por igual, le gustan tanto las chicas como los chicos en una proporción aproximada del 50% para cada sexo.
4. Homosexual con predominancia heterosexual. Es el gay que hace una vida muy hetero, tiene una actitud muy heterosexual y aún siente atracción por mantener relaciones esporádicas con el sexo opuesto.
5. Predominantemente homosexual pero accidentalmente hetero. Se siente totalmente homosexual pero puede tener alguna relación heterosexual a lo largo de su vida como experiencia accidental.
6. Exclusivamente homosexual. Nunca ha tenido relaciones con el sexo opuesto, el simple hecho de pensarlo le resulta desagradable. Nunca lo llevaría a cabo, ni accidentalmente.
Clasificación que evalúa el historial sexual de cada persona, sus episodios y experiencias sexuales y sus fantasías. Con una escala que va del 0 (exclusivamente heterosexual) al 6 (exclusivamente homosexual).
Por supuesto, no hay que decir que este estudio mide el grado que va desde la heterosexualidad a la homosexualidad, y no tiene que ver con valoraciones o juicios sobre la masculinidad de cada uno, que es un tema totalmente aparte.
Se trató de un estudio muy novedoso para su época, y fue el primero en plasmar la diversidad sexual de manera tan amplia. Su primera publicación se hizo en el libro Conducta sexual en el varón en 1948, y tuvo su réplica con Conducta sexual en la mujer en 1953.
Los 7 primeros grados se enumeran en el primer volumen, y en el segundo tomo se añadió un grado adicional, denominado X usado para la asexualidad, aquellos que no tienen atracción por ningún género.
Kinsey escribió: “El varón no es quien representa estas dos poblaciones distintas, heterosexual u homosexual. El mundo no puede ser dividido entre cabras y ovejas. Es un fundamento de la taxonomía en que la naturaleza raramente se enfrenta con categorías separadas. El mundo vivo es continuo en cada uno de sus aspectos”.
Otras estadísticas curiosas que presentaba el Informe Kinsey son que el 11,6% de los varones y mujeres blancos entre 20 y 35 años manifiestan una clasificación 3 (bisexualidad). Que el 60% de los hombres y el 33% de las mujeres participaron al menos en una práctica homosexual manifiesta antes de los 16 años de edad.