Lucía Quintana: “¡Viva la comedia!”

Cumple treinta años sobre los escenarios esta precoz actriz de 41 –hija del actor Juan Antonio Quintana–, que debutó sobre las tablas con once. Para celebrarlo, Lucía Quintana se mete en la piel de uno de los personajes más populares escritos por Enrique Jardiel Poncela, la Leticia de Un marido de ida y vuelta. El […]

Agustín Gómez Cascales

Agustín Gómez Cascales

He viajado en limusina con Mariah, he tomado el té con Beyoncé, he salido de fiesta con J.Lo y he pinchado con RuPaul. ¿Qué será lo próximo?

15 diciembre, 2016
Se lee en 6 minutos

Temas: ,

Lucía Quintana: “¡Viva la comedia!”

Cumple treinta años sobre los escenarios esta precoz actriz de 41 –hija del actor Juan Antonio Quintana–, que debutó sobre las tablas con once. Para celebrarlo, Lucía Quintana se mete en la piel de uno de los personajes más populares escritos por Enrique Jardiel Poncela, la Leticia de Un marido de ida y vuelta. El montaje dirigido por Ernesto Caballero, todo un homenaje al gran dramaturgo, se ha convertido en Jardiel, un escritor de ida y vuelta. El texto de la comedia original se mantiene intacto, aunque se ha incorporado el personaje del propio autor, interpretado por Jacobo Dicenta, de manera que su historia se entrelaza con su obra. ¿La intención? Rendir tributo al creador, además de hacer reír al público con este clásico de nuestro teatro.

Lucía Quintana: “¡Viva la comedia!”

SHANGAY ⇒ ¿Te alegra que vuelva Jardiel Poncela al teatro por Navidad?
LUCÍA QUINTANA
⇒ Jo, claro. Y que vaya al María Guerrero, que es mi teatro favorito de Madrid. Este va a ser mi quinto espectáculo en él, y no puedo estar más contenta. Aparte de que la sala es perfecta, es un teatro con unas medidas muy equilibradas, tanto para trabajar como actor como para ser espectador es idóneo. Le dije a Ernesto [Caballero] de broma que podíamos tomarnos la uvas allí, como es tradición, pero no se puede, porque es un día de descanso en el teatro. Pero estamos el 25 de diciembre y el 1 de enero, así que funciones en días típicamente navideños sí vamos a tener.

SHANGAY ⇒ ¿Qué te parece trabajar en días tan señalados?
LUCÍA QUINTANA
 ⇒ No me disgusta. Además, tengo un hijo de seis años que está deseando ver la función y no tendrá ningún problema en venir en esos días.

SHANGAY ⇒ Así que tu hijo ya está mamando teatro, como tú a su edad…
LUCÍA QUINTANA
 ⇒ Sí, el otro día me dijo que quería ser actor. Como su abuelo es actor, su padre es Alfredo [Sanzol, autor y director], su abuela es pintora y su madre, actriz, algo hará relacionado con esto, aunque sea como hobby. No me importa que quiera ser actor, la verdad, aunque está la cosa muy difícil. ¿Pero cuándo no lo ha estado?

Lucía Quintana: “¡Viva la comedia!”

SHANGAY ⇒ Si hace unos años te vimos interpretando un Mihura, ahora te toca un Jardiel…
LUCÍA QUINTANA
 ⇒ Me voy a especializar en las mujeres de grandes autores clásicos españoles [risas]. Maribel es uno de los grandes personajes del teatro español moderno, y Leticia es otro. Frente a la mirada más tierna de Mihura, la de Jardiel es un pelín más ácida por momentos, aunque también poética. Claro, que Maribel era una prostituta y Leticia es una mujer con la mentalidad de una niña de seis años [risas].

SHANGAY ⇒ ¿Cómo te sientes interpretando a una mujer tan infantil?
LUCÍA QUINTANA
 ⇒ Es una gozada. Porque es una mujer con un punto extravagante, inconformista, manipuladora…, todo desde esa mentalidad. Hace un viaje muy bonito hacia la madurez y la conciencia, es un personaje muy divertido de trabajar.

SHANGAY ⇒ En el reparto hay mucho nombre con peso…
LUCÍA QUINTANA
 ⇒ Es un equipo fantástico. Está la nieta de Jardiel, Paloma Paso Jardiel, está Jacobo Dicenta… Aquí me reencuentro con Jacobo, con el que trabajé hace muchos años en un Shakespeare, con varios compañeros y con Ernesto, que además fue mi profesor en la escuela de arte dramático, y con el que hacía once años que no trabajaba.


“En el teatro es donde más feliz estoy, porque el actor solo depende de sí mismo”


SHANGAY ⇒ ¿Te parece importante que este montaje contribuya a presentar a las nuevas generaciones a Jardiel?
LUCÍA QUINTANA
 ⇒ Sí, porque es una gran función. De las grandes comedias se dice siempre que son mecanismos de relojería, y es verdad, además de ser un gran homenaje a Jardiel. Es una obra de las que crean afición. Y yo ya he hecho unas cuentas de estas: Las bicicletas son para el verano, Maribel y la extraña familia… Además, es una manera de volver a reivindicar la comedia, que suele estar denostada, cuando para mí es el gran género, el que lo engloba todo, el más difícil.

SHANGAY ⇒ ¿Por qué se os sigue reconociendo más cuando hacéis drama?
LUCÍA QUINTANA
 ⇒ No tengo ni idea. Porque la comedia es como música, es matemática; las situaciones tienen que estar vivas para generar hilaridad y se produzcan la sorpresa, la contradicción… La vida es eso, es comedia. ¡Viva la comedia! [risas].

Lucía Quintana: “¡Viva la comedia!”

SHANGAY ⇒ ¿Qué tal la experiencia de Cuéntame, donde también vas atrás en el tiempo?
LUCÍA QUINTANA
 ⇒ Muy bien. He entrado con un personaje pequeño, de una ginecóloga, en el año 1985, cuando empezaban los centros de planificación. Un momento muy interesante, aunque es hace nada, realmente. El plató es una gozada, muy bonito, muy real.

SHANGAY ⇒ ¿Te gusta la televisión tanto como el teatro?
LUCÍA QUINTANA
 ⇒ Me gusta cada vez más, y no solo porque cada vez se hagan mejores series en este país. Que los personajes puedan tener un desarrollo me interesa muchísimo. Me he divertido mucho en televisión, en series como Maitena. Pero en el teatro es donde más feliz estoy, porque el actor en el escenario solo depende de él mismo prácticamente. El directo, como en música, es el directo. Y la comunicación que se establece en un momento concreto con el público no se puede comparar con nada.


“La comedia suele estar denostada, cuandio para mí es el gran género, el  que lo engloba todo, el más difícil”


SHANGAY ⇒ ¿Te parece que 2016 ha sido un buen año teatral?
LUCÍA QUINTANA
 ⇒ Buenísimo. Aprovecho cuando no tengo al niño y corro a ver todo lo que puedo, y lo cierto es que he visto obras maravillosas. Entre las últimas, Todo el tiempo del mundo de Pablo Messiez, y La cocina. En Madrid, en general, ahora mismo hay un nivelazo. Supongo que en Barcelona también, pero claro, no tengo tiempo para ir a ver lo que hacen… [risas]. Es una pena que sigamos ahogados, porque la falta de apoyo a la cultura que hay en este país es un desastre.

SHANGAY ⇒ Tuviste una fructífera etapa junto a Alfredo Sanzol y otra con Gerardo Vera, ahora retomas la que te une a Ernesto Caballero. ¿Han sido tus tres grandes directores?
LUCÍA QUINTANA
 ⇒ Sí, porque son con los que más veces he repetido. Y espero seguir repitiendo, porque los tres tienen universos propios y son grandes contadores de historias. Con Gerardo volveré a trabajar en breve en Los sueños de Quevedo para la compañía Nacional de Teatro Clásico, y saldremos de gira también con Los hermanos Karamázov. Una noticia muy buena para los tiempos que corren, porque que los montajes mueran tan pronto me da mucha pena.

SHANGAY ⇒ ¿Te veremos en algún momento en uno ambientado en el presente?
LUCÍA QUINTANA
 ⇒ ¡No lo sé! Porque es verdad que llevo ya unos cuantos de época [risas]. ¿Con la cara lavada y ropa normal? Ojalá que sí.


LA OBRA JARDIEL, UN ESCRITOR DE IDA Y VUELTA SE REPRESENTA HASTA EL 12 DE FEBRERO EN EL TEATRO MARÍA GUERRERO DEL CENTRO DRAMÁTICO NACIONAL (C/TAMAYO Y BAUS, 4) DE MADRID.


 

Shangay Nº 570
Portada de la revista Anuario 2024
  • Diciembre 2024
Shangay Voyager Nº 40
Portada de la revista Shangay Voyager 40
Anuario 2024
Portada de la revista Anuario 2024
  • Diciembre 2024