En Viajo sola, que dirige Maria Sole Tognazzi, la italiana Margherita Buy vuelve a coincidir con su pareja fetiche en el cine, Stefano Accorsi, en la que es su tercera película juntos. El responsable de unirlos por primera vez en 2001 fue el director Ferzan Ozpetek en la película de culto gay El hada ignorante, en la que la actriz descubría que su difunto marido mantenía una relación amorosa con otro hombre (Accorsi).
Desde entonces, el director ha encontrado en Buy una suerte de musa y amiga con la que reincidir a menudo –la última, en la también gay e inédita en nuestro país Magnifica presenza–. “Ferzan me gusta porque sus películas denotan una fuerte personalidad. El hada ignorante fue una película especial, no solo porque la historia me parecía importante, también porque recuerdo que yo me acababa de quedar embarazada cuando empezamos a rodar. Después, ni te imaginas la de mujeres que se acercaban por la calle para contarme que ellas también habían pasado por una situación similar de la que no se atrevían a hablar”, recuerda. “Lo sorprendente de la película es que contribuyó a cambiar la opinión de la gente, a abrir el debate sobre la comunidad gay e inauguró una nueva etapa de filmes gays italianos que vendrían después. Para la época, era una historia muy particular y valiente que iba más allá de una relación homosexual convencional”.