De no ser por su afición al thriller erótico, el cine galo no habría exportado conceptos como femme fatale, affaire o ménage à trois, que tanto juego han dado dentro y fuera de su filmografía. La última en engrosar esa lista de películas francesas de misterio, romance y sexo es El amor es un crimen perfecto, dirigida por los hermanos Jean-Marie y Arnaud Larrieu, responsables de, entre otras, Pintar o hacer el amor.
En El amor es un crimen perfecto, Mathieu Amalric interpreta a Marc, un escritor y profesor universitario de literatura más que acostumbrado a seducir a sus alumnas. Cuando desaparece Bárbara (Marion Duval), su última conquista y una de sus alumnas más brillantes, Marc conocerá a su madre, Anna (Maïwenn), una mujer con la que vivirá un apasionado pero retorcido romance en el frío entorno natural de Lausanne. Completan el reparto Karin Viard, Sara Forestier y Denis Podalydès.
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