Ni muerta le dejan tranquila. Jeniffer Gable, una mujer transgénero de Idaho que murió en octubre a causa de un aneurisma cerebral, ha sido enterrada como un hombre por su familia. En lugar de la mujer de pelo largo y perfecta sombra de ojos, sus amigos se encontraron a Geoffrey Charles Gable (su anterior identidad) vestido como un hombre, sin la ya mencionada melena y obviando su reasignación de sexo en su obituario.
“Han intentado que pareciese un chico”, explicaba enfadada Stacy, una de sus amigas. Su entorno, horrorizado por lo vivido en el funeral, está alzando la voz para que quede claro que quien ha perdido la vida es Jeniffer, que recibió decenas de condolencias con alusión directa a su verdadero nombre en el libro memorial de dedicatorias. Queda claro que, pese a que se la recordará como “extrovertida y con clase”, nunca fue aceptada del todo por su familia, que ha decidido tomarse una lamentable revancha cuando ya no hay turno de réplica. Sus familiares se negaron a hacer comentarios alegando que se trataba de una “situación familiar”, según relata Daily News. Descanse en paz, si es que se puede.
Las imágenes del funeral que demuestran los hechos. Pasa página
> Revolución LGTB en los institutos americanos
> «Todos somos diferentes»
Karla Sofía Gascón: "No solo soy una esperanza para la minoría trans y el colectivo al que represento"
'Normas para una página de sucesos', el planazo de estas Navidades con Divergente, la nueva plataforma de streaming
Una profesora gana una demanda contra la discriminación LGTBIQ+ a varias escuelas de Oregón
