A ver quién es capaz de aguantar sin que se le escape una lágrima. Ya en el pasado hemos hablado alguna vez de niños que, independientemente de cómo se sientan en cuanto a su género, son apoyados por su familia. La hija de Brad Pitt y Angelina Jolie es un hermano más y el hijo de Gwen Stefani se pinta las uñas de rosa y no pasa absolutamente nada. Pues bien, la historia de Milla y Renée –su madre– traspasa los límites de lo conmovedor.
«No es fácil ser yo. Ahora mismo estoy pasándolo mal en el colegio. Los niños me insultan, me llaman travesti, chica gay o raro. Nadie me entiende, nadie quiere ser mi amigo… A partir de hoy quiero vivir como un chico». Así concluye un vídeo de 7 minutos donde Renée homenajea a Milla como muestra de su total comprensión y apoyo. Nacida en 2004 como niña, le fue diagnosticada una disforia de género años después.
Desde el comienzo, prefería jugar con coches, disfrazarse de superhéroe y llevar el pelo corto. Mucha gente pensaba que sería pasajero, pero Milla empezó a odiar su cuerpo y le pidió a su madre que le consiguiese los medicamentos necesarios para ser un chico. Si algo está claro, es que Renée hará todo lo que esté en su mano para que sea feliz. Enhorabuena.