«Si tocan a uno nos tocan a todos». Bajo ese lema, miembros de la Confederación General del Trabajo (CGT) se han manifestado esta mañana delante del Supersol de la calle Julián Romea en Madrid para protestar contra un supuesto caso de homofobia.
La empresa de supermercados era acusada de despedir a Estrella, Javier y Ricardo por el simple de hecho de recoger firmas para convocar una asamblea. Parace que la historia tiene más profundidad y que se han buscado pretextos para ocultar la discriminación.
Uno de los afectados, dependiente gay de la panadería, habría sufrido desde hace meses ataques homófobos por parte de sus compañeros sin recibir ningún tipo de protección, según informaba el sindicato. «Maricón o bujarra» era lo más elegante que podía escuchar mientras trabajaba, y una vez puso su caso en manos de la CGT comenzaba una investigación que ha acabado con esta manifestación. Una pancarta con mensajes como «Basta de homofobia y represión en Supersol» o «Estrella, Javier y Ricardo readmisión» ha presidido la comitiva, más ruidosa que numerosa. Prometen seguir dando guerra hasta que la situación se aclare.