“Va a haber sorpresas”. Esta era la confesión de Sandro en una entrevista para Vertele antes del momento que llevamos semanas esperando: la gran final de QQCCMH. Yo no sé si puedo con tanta emoción. Venimos de la fábula de la despechada y el tartamudo con sus pretendientes, Rá y Vicente como protagonistas, y ahora nos acercamos al momento cumbre.
Pero su cara es un poema de los que se escriben cuando la tragedia te ha golpeado de lleno. Ojos vidriosos, gesto torcido y labios en posición de rabia. Acercarse a él es armarse de valor, va a explotar.
Las dudas no se disipan. Tiene un “sentimiento muy fuerte ahora mismo” y no hay manera de que se aclare. Y para colmo, su madre entra en escena y sentencia: “Tú sabes que yo la mentira, cari, no la soporto”. ¿Y entonces qué hacemos? Pues como mínimo, esperar a esta noche.
P.D. El avance acaba con un revelador “¿Alguien tiene algo que decir en la sala?”. Una voz masculina dice que sí y… Supongo que lo bueno se hace esperar.