Dicen que el rugby es el deporte más noble del planeta, y acciones como estas parecen no dejar lugar a dudas. Toda excusa es buena si con ella se lucha contra la homofobia, un mal a erradicar en el mundo del deporte. Así, todo activismo para aportar una mayor visibilidad siempre se recibirá con los brazos abiertos, y he aquí dos ejemplos a los que merece la pena prestar atención.
David Pocock, una superestrella australiana y capitán de la selección de su país, paraba un partido de su equipo, los Brumbies, para informar al árbitro de que a dos compañeros suyos les estaban dirigiendo insultos homófobos irreproducibles para amedrentarles. Después del encuentro, lo explicaba en zona mixta: “Como jugadores, no vamos a tolerar estas faltas de respeto, le dije al árbitro que era inaceptable. Podrás ser el hombre más duro del planeta y nada tiene que ver con usar ese lenguaje”. Es necesario recordar que jugadores de su país ya se plantaron contra Brunei y sus leyes homófobas cuando intentó patrocinar la liga australiana.
Pese a que algunos entendidos vieron el gesto como innecesario, si algo ha caracterizado la carrera de Pocock es su defensa de los derechos del colectivo LGTB, postura que volvió a poner de manifiesto una vez más. “En gran medida, lo que ocurre en el deporte es reflejo de lo que vivimos en nuestra sociedad. Nos dirigimos hacia una vida más inclusiva donde el matrimonio igualitario va camino de hacerse efectivo. Quiero ver el papel que juega el deporte en todo esto”, explicaba. Esto es lo que se llama tener valores.
Mientras, en la universidad londinense King’s College han puesto en marcha otra iniciativa con el mismo objetivo: erradicar la discriminación. Y oye, sabiendo que están fibrados, no se les ha ocurrido mejor opción que desnudarse y ser fotografiados por sus propios compañeros del periódico Roar News. Las imágenes formarán parte de un calendario cuyos beneficios irán directamente a la asociación Broken Rainbow, que trabaja con deportistas que sufren ataques homófobos. Personalmente, nos encanta la pose de uno de ellos en la mesa de billar… Enhorabuena a todos.