No hay duda. La palabra de moda en Irlanda es YES. Un 62% de los votantes, o lo que es lo mismo, más de 1.200.000 personas, se pronunciaron a favor del matrimonio gay en el referéndum histórico del pasado fin semana en el país. Mientras, un 38% (734.300 personas) votaron en contra, dejando la participación en un fabuloso 60%, registro nunca antes alcanzado en unos comicios de este estilo. Dublín ya es arcoíris.
Eso sí, para obtener los datos definitivos hubo que esperar unas horas que para todos se hicieron eternas, pues el recuento a la irlandesa (procedimiento manual) no finalizó hasta la tarde del día después de la llamada a las urnas, que fue el viernes 22. No obstante, Aodhán Ó Ríordáinsaid, el ministro de Igualdad, ya se aventuraba a celebrar una victoria a través de Twitter con una alegría irreproducible.
Las reacciones no se hicieron esperar. El ministro de salud expresaba su felicidad por celebrar “un día histórico para Irlanda y vamos a ser un rayo de luz para el resto del mundo”, mientras que uno de los mayores defensores del ‘no’, el director del Iona Institute David Quinn, se resignaba felicitando a los vencedores “por un trabajo bien hecho”.
No obstante, no iban a ser los políticos los únicos en pronunciarse. Numerosas celebrities del mundo de la música festejaban el acontencimiento a través de las redes sociales. Personas de la relevancia de Miley Cirus, Sam Smith, Hozier o Róisín Murphy se mostraban eufóricos ante la noticia.
Así, la enmienda reconocerá el matrimonio “sin distinción de género” en el país de Oscar Wilde gracias a, entre otras cosas, el impulso del voto joven. Es preciso recordar que hace no tanto, en 1993, la homosexualidad era considerada ilegal. Por ello, se trata de un avance en materia de derechos LGTB impensable para los más antiguos del lugar. Simplemente, enhorabuena, y a celebrarlo.
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