Un gran paso para los derechos LGTB en el continente africano. Hasta ahora la legislación de Mozambique castigaba la homosexualidad, tipificada como un delito de “vicio contra natura”, con penas de hasta 3 años en cárceles o campos de trabajo.
Pero la situación va a cambiar radicalmente. Hace 180 días el Gobierno del país aprobaba una reforma del Código Penal vigente, en la que se derogaban las leyes que hacían referencia a las prácticas homosexuales. Pero además, proclamaban su intención de hacer oficialmente legal la homosexualidad en Mozambique a partir del 29 de junio, un día después del Día Internacional del Orgullo Gay.
Hasta hace unos meses, la situación en Mozambique era totalmente contraria a las prácticas homosexuales. A pesar de que el Código Penal no tipificaba específicamente el sexo homosexual como delito, los artículos 70 y 71 contemplaban los delitos de “vicios contra natura”, que habían servido hasta entonces para discriminar y castigar a gays, lesbianas, bisexuales y transexuales. Un Código Penal que estaba obsoleto y que ha rectificado esta hostigación en su nueva revisión.
La Agencia de Información de Mozambique ha comunicado que “el nuevo Código Penal barre gran cantidad de la herencia colonial mohosa, incluyendo la mención de vicios contra natura”. Un gran avance en derechos LGTB, que al menos, ya no se castiga.
Lambda, la Asociación en defensa de los Derechos LGBT de Mozambique ha estado trabajando muy duro durante estos años para que el Gobierno reconozca plenamente las relaciones sexuales entre personas del mismo sexo.
Además de eliminar estos delitos, el Gobierno anuncia la legalidad oficial de la homosexualidad en el país para el próximo 29 de junio, justo un día después del Día Internacional del Orgullo Gay. Pero, un representante de La Asociación Lambda advierte que esto tampoco garantiza los derechos LGTB, solo es un comienzo en la gran trayectoria de la que ya gozan otros países: “Nuestro principal interés es precipitar un cambio en la sociedad para que sea más favorable a la libre expresión de la orientación sexual e identidad de género. El silencio del estado mozambiqueño legitima la discriminación y refuerza el estigma al que están sujetas las personas LGBT en sus comunidades, sus lugares de trabajo y escuelas”.
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