Una de las grandes virtudes del periodista, guionista y escritor Paco Tomás es la capacidad innata que posee para contagiar su interés por aquellos detalles que muchos considerarían insignificantes, y que realmente lo significan todo. En programas de radio como Wisteria Lane y televisivos como Alaska y Segura, Tomás ha contribuido a dar voz a creadores, activistas o agitadores a los que no suele darse la relevancia que merecen, quizá por no ser lo suficientemente populares.
En su primera novela, apuesta por dar voz a gente corriente y por centrarse en describir su cotidianidad en una ciudad de provincias. Su protagonista, Fidel, es en apariencia un hombre gris sin mucho que contar. Paco Tomás demuestra con su esmerada y pausada prosa que cualquier persona, por aparentemente anodina que pueda parecer, tiene una historia que merece la pena ser contada.
La cantante Alaska leyendo Los lugares pequeños.
Utiliza una estructura que en un principio puede descolocar, pero que contribuye a generar el deseo por seguir leyendo y reconstruyendo las piezas de un puzle que no sabemos qué aspecto va terminar teniendo. Su apuesta por la no linealidad y por un estilo que combina las descripciones detalladas y reflexiones agudas con la acción propiamente dicha crea un tono de inquietud que le permite huir del costumbrismo fácil. Dosifica la información sobre el protagonista, y el lector se ve obligado a resolver todas las dudas que le genera, aun a riesgo de no acertar. Y se explaya en sus descripciones de ambientes y referentes, valiosísima información para seguir dando forma a ese complejo hombre que es Fidel.
El autor, Paco Tomás.
Si Paco Tomás suele recurrir en sus artículos periodísticos, como el que publicamos recientemente, a una fina ironía, aquí la ha contenido, y el libro lo agradece. Predomina un tono entre melancólico y amargo en ese continuado soliloquio que protagoniza Fidel, que uno no sabe hasta qué punto es álter ego del autor. Lo cierto es que Paco Tomás describe a través de su personaje a toda una generación, que sin duda ha tenido vivencias muy parecidas y reconocerá mil y un guiños pop. Igual que reconocerá los conflictos familiares y laborales que plantea el autor, tan propios de nuestra cotidianidad, tan complejos a pesar de que parezcan irrelevantes. Son todos esos ‘lugares pequeños’ los que explora con mucho arte en esta novela Paco Tomás. Verlos reflejados en sus páginas nos recuerda lo importante que es prestar atención a cada detalle de la vida, y lo que se agradece que haya quien nos ayude a hacerlo.
Los lugares pequeños · Paco Tomás · Punto en Boca · 18€
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