La última vez que visitó Madrid fue hace tres años, y entonces aprovechamos para entrevistarle. Descubrimos que es un señor con un estupendo sentido del humor, además de grandes canciones pop. Y aunque tiene claro que debe basar sus actuaciones en sus hits ochenteros, no duda en dosificar sus nuevas canciones, que son las que le animan a seguir dedicándose a la música. “Aunque ahora enfoco mi carrera como la llave para hacer turismo, básicamente”, afirmaba entre risas.
SHANGAY ⇒ ¿Te surgen muchas posibilidades para viajar?
RICK ASTLEY ⇒ Sí. Entre mis actuaciones en solitario y las minigiras que hago con otros artistas de los 80 me estoy recorriendo el mundo.
SHANGAY ⇒ ¿Le has cogido el gusto a volver a interpretar tu repertorio de siempre?
RICK ASTLEY ⇒ La verdad es que sí. Estuve muchos años retirado, como mucho cantaba mis canciones antiguas en la boda de un algún amigo si me veía forzado a hacerlo… Ahora disfruto al comprobar la reacción que mi música tiene en la gente; yo soy el primero al que le gusta ver en directo a artistas que llevan siglos sin actuar.
SHANGAY ⇒ ¿Por qué decidiste dejar la música?
RICK ASTLEY ⇒ Me harté de lidiar con la industria. Y me quise centrar en mi familia. Tuve a mi hija muy joven [ahora tiene 23 años], y aunque estaba en un momento estupendo de mi carrera decidí que quería dejar de viajar y verla crecer… Ahora es al revés, canto porque me apetece viajar.
«EN LOS 80 DESCOLOCABA A MUCHA GENTE POR MI VOZ»
SHANGAY ⇒ ¿Te sorprende que las nuevas generaciones conozcan tus grandes hits?
RICK ASTLEY ⇒ Es que Internet lo ha cambiado todo, y la gente joven escucha de todo, igual que yo, que descubro un montón de música gracias a mi hija.
SHANGAY ⇒ También tiene que ver con que protagonizaste en 2007 uno de los grandes fenómenos virales de los últimos tiempos, bautizado como ‘rickrolling’, además. ¿Cómo llevaste la explosión mundial de enlaces trampa que desembocaban en tu tema Never Gonna Give You Up?
RICK ASTLEY ⇒ Fue una locura de la que procuré mantenerme al margen. Porque en realidad se usó un vídeo mío como podría haber sido cualquier otro, era un fenómeno con vida propia, del que no intenté beneficiarme. Lo hice, obviamente, porque millones de personas descubrieron una canción que solo podían haber conocido gracias a sus padres. Tampoco intenté sacar dinero de aquello, aunque sí acepté aparecer en un programa especial que se retransmite durante el desfile navideño de Macy’s en Nueva York. Me pagaron de maravilla y me pareció muy divertido apuntarme al rickrolling por una vez.
SHANGAY ⇒ ¿Cómo recuerdas tus días de popularidad masiva en los 80?
RICK ASTLEY ⇒ Hubo tantos días buenos como malos, como en la vida de cualquier joven estrella pop. En ocasiones me sentía el rey del mundo, y en otras, cuando conseguía salirme de la burbuja en que estaba metido, me parecía todo una mierda. Al formar parte de la factoría de Stock Aitken & Waterman mi experiencia fue especial, sobre todo en Inglaterra, donde te juzgaban de una manera concreta por sacar discos con ellos.
SHANGAY ⇒ Te convertiste en un original disco crooner…
RICK ASTLEY ⇒ Descolocaba a mucha gente por mi voz. Porque cuando me di a conocer, a los 21, parecía un chico de 13. Si hubiese sido un tiazo de rasgos fuertes a nadie le habría sorprendido mi manera de cantar, pero el contraste entre mi apariencia y mi manera de cantar llamó mucho la atención. Y me siento muy orgulloso de haber grabado Never Gonna Give You Up, para mí una de las mejores canciones de Stock Aitken & Waterman, si no la mejor. Esa producción, en la que yo me limité a cantar, se convirtió en la base de muchas otras canciones que crearon a partir de ese momento.
«EN OCASIONES ME SENTÍA EL REY DEL MUNDO, Y EN OTRAS, CUANDO SALÍA DE LA BURBUJA EN QUE ESTABA METIDO, ME PARECÍA TODO UNA MIERDA»
SHANGAY ⇒ ¿Eres amigo de Kylie Minogue, compañera de escudería en aquellos tiempos?
RICK ASTLEY ⇒ No diría que amigos, solo conocidos. Fue muy raro cuando nos encontramos, hará diez años, en un hotel en Los Ángeles. Nos saludamos, pero tampoco sabíamos de qué hablar, porque no nos conocemos lo suficiente. Pero el hecho de haber formado parte de Stock Aitken & Waterman nos hace sentir que tenemos algo en común, como si hubiésemos ido a la misma escuela… o hubiésemos compartido celda en la misma prisión [risas]. Con Jason Donovan he hablado de eso en un par de ocasiones. Es algo muy raro, pero todos los que vivimos aquella experiencia no necesitamos compartirla, nos basta con mirarnos para saber que hemos pasado por algo parecido.
SHANGAY ⇒ ¿Eres fiel a los arreglos de la época en tus conciertos?
RICK ASTLEY ⇒ Sí. Aunque, por ejemplo, me parece que Kylie hace muy bien en renovar continuamente el sonido de sus antiguas canciones, porque es una artista que sigue lanzando discos y acumulando éxitos, que mezcla en directo con los antiguos. Quien viene a verme a mí, por el contrario, no tiene ningún interés en que le presente una reinterpretación radicalmente nueva de Never Gonna Give You Up, así que procuro dar a mi público lo que quiere de mí.
RICK ASTLEY ACTÚA EL DÍA 16 DE SEPTIEMBRE EN OVIEDO, EL 17 EN MADRID (LA RIVIERA), EL 18 EN MÁLAGA, EL 19 EN BENIDORM, EL 25 EN BARCELONA Y EL 26 EN PALMA DE MALLORCA.