Llegó a California por amor y por amor se vuelve a marchar. A escasos meses de que cambie Los Ángeles, ciudad en la que reside desde 1998, por Sidney, donde piensa comenzar una nueva vida junto a Brad, su novio australiano al que conoció a través de Facebook, el español Marcos Bellet nos cuenta, casi a modo de despedida, lo mucho que han dado de sí los 17 años que ha pasado en la meca del cine.
“Me había echado un novio mexicano-estadounidense y decidí venirme con él. Coincidió que el negocio que tenía en Madrid cerró y que mi madre había fallecido. Así que tenía el dinero de la herencia y nada que hacer, y me vine a la aventura con la idea de pasar un año sabático”. Quería dedicarse a viajar y conocer Estados Unidos, pero nada de eso pasó. En su lugar, se quedó en Los Ángeles lamentándose de que aquello no fuera como Madrid. “Me quejaba por todo: que si era horroroso, que sin coche no hacías nada, que era muy grande… En lugar de adaptarme a Los Ángeles, yo quería traer Madrid conmigo. Lo eché mucho de menos durante un año”.
Hasta que decidió tomarse la ciudad con más filosofía y fundar, en el año 2000, Tentaciones, una revista gay de ocio y cultura destinada al público latino. “Queríamos hacer una copia y homenaje de lo que era Shangay en España. Empezamos a llamar a las distribuidoras de cine y a las casas de discos y explicarles que era necesario dirigirse a ese público. Y empezaron a concedernos entrevistas, sin tener ninguna experiencia en periodismo ni marketing. Nos lanzamos a la aventura y nos sorprendió la recepción y el entusiasmo con el que se recibió la revista”. La publicación se mantuvo durante tres años y, en ese tiempo, consiguieron colaborar con artistas como Destiny’s Child, Shakira o Laura Pausini.
“Lo mejor era llegar a una entrevista con la idea preconcebida de que el entrevistado era un homófobo y encontrarte gratas sorpresas, como me pasó, por ejemplo, con Carlos Vives. La gente nos acogió mejor de lo que creíamos, pero lo que falló fue la publicidad”. En ese tiempo, incluso llegó a organizar la primera visita de Fangoria al Latin Pride de Los Ángeles.
¿Qué relación tiene Marcos con el Orgullo gay de West Hollywood? Pasa página
Ahora, reconvertido en diseñador gráfico tras trabajar durante años para una agencia de fotografía, Marcos está a punto de despedirse de Estados Unidos. No sin antes recomendarnos las fiestas del Orgullo Gay de West Hollywood, con el que colabora desde hace tres años. “Ayudo a las West Hollywood Cheerleaders, un grupo de drag queens que se dedica a recaudar fondos para organizaciones que ayudan a la lucha contra el VIH/sida. Así que suelo acompañarlas en el desfile, cubo en mano, pidiendo donaciones”, cuenta.
El viajero que no coincida con el Orgullo, debe saber que los sitios con mejor ambiente gay de la ciudad –el propio Marcos regentó durante una época un club gay latino llamado Olé Olé, en el valle de San Fernando– se reparten por las zonas de West Hollywood, Silver Lake –con los clubes Eagle, Akbar y Faultline a la cabeza– y, más recientemente, Downtown. “En West Hollywood, donde hay mucha pose, está el Fubar. Cuenta con una sesión muy popular la noche de los jueves que se llama Big Fat Dick. Los clientes que quieran se dejan fotografiar la polla y al final de la noche el público elige a un ganador, que se lleva una botella gratis. Mickey’s es el bar de los strippers gogós, espectaculares todos. Y, para terminar, recomiendo The Abbey, uno de los diez mejores bares de Estados Unidos, con unos camareros de impresión”.
¿Cuáles son los lugares imprescindibles según Marcos? Pasa página
5 PUNTOS CLAVE QUE NO DEBEN FALTAR EN UNA VISITA
GRIFFITH OBSERVATORY
“Desde aquí tienes las mejores vistas de Los Ángeles y un show espectacular en el planetario. Ver cómo el sol se pone sobre el Hollywood Sign es imprescindible. Es famoso por Rebelde sin causa y Los ángeles de Charlie”.
PASEO DE LA FAMA
“Es horroroso, pero hay que ir. Está lleno de gente que se disfraza de los personajes de las películas, te asaltan y te piden dinero para que te hagas una foto con ellos”.
GETTY MUSEUM
“Tiene dos sedes, The Getty Center y The Getty Villa. Es gratis, cuenta con unos jardines impresionantes y una colección de obras bastante decente para ser Los Ángeles”.
DOWNTOWN
“Después de haber estado casi abandonada, ahora es una de las zonas más exclusivas y caras de la ciudad. Aquí está el edificio Bradbury, y en la calle Broadway encuentras arquitectura art deco. Hay un distrito de moda, otro de joyería, y están la Catedral, el Disney Concert Hall y la Placita Olvera”.
LACMA
“Las exposiciones temporales son lo mejor de este museo de arte contemporáneo. Y todos los sábados celebran conciertos gratuitos a los que merece la pena ir”.