Redecora tu vida. Eso debieron pensar Erin Kennedy DeLong y su marido, Joe, cuando descubrieron una pintada homófoba en la puerta de su garaje con la que un desconocido pretendía humillar a sus dos hijas adolescentes, ambas públicamente bisexuales. Alguien había escrito con espray las palabras «Soy Gay» con intención de ofender a Miranda, de 17 años, y Emily, de 14.
Este matrimonio de New Jersey no lo dudó ni un momento. En lugar de repintar la puerta con la anodina pintura gris de siempre, aprovecharon la ocasión para cubrirla con paneles multicolores en referencia a la bandera gay, demostrando que apoyan totalmente la visibilidad LGTB de sus hijas. «Somos una familia LGTB y lo decimos alto y claro», declaraba la madre a The Huffington Post. «Hemos aprendido que hay mucho por recorrer en el camino hacia la aceptación LGTB».
La propia Erin publicó fotos del antes y el después en la página de Facebook de Stop Homophobia, al tiempo que lanzaba este mensaje al mundo: «Alguien intentó vandalizar nuestra casa la semana pasada en un intento de avergonzar a nuestras dos hijas bisexuales. Hemos pensado que algunas declaraciones se merecen algo más que pintura gris». El garaje, sin duda, ha ganado con el cambio.