“Eso no existe”. A José Carlos no le cuadran las cuentas: ha decidido participar en un programa tan recatado como Adán y Eva pero se hace cruces con que su pretendida sea bisexual. “Es que no sé que tipo de moda es ser bisexual, no se desde qué año lo vienen haciendo”, explica atónito. Libre de ropa, nos es capaz de entender el amor sin ataduras sexuales. Con un “las mujeres están hechas para los hombres y los hombres para la mujeres” el asunto queda zanjado, y preferimos no continuar ahondando en su forma de pensar.
Y así pasa. Bastaría con la aparación de Andoni para adelantar a nuestro protagonista y llevarse el gato al agua. Entre el poco aperturismo de uno y la casualidad de que el vasco y María, la Eva pansexual, ya se conocían a través de Internet, fue suficiente para que el andaluz volviese con su madre. Ya no tendrá que explicar en su casa que está conociendo a una mujer q la que le gustan los “tíos y las tías”. Game over…
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