“Soy un adicto a la moda y al gimnasio”. Esta fue la carta de presentación de Suso cuando entró en Mujeres y Hombres y Viceversa.
Eso sí, visto su pasado, queda claro que la afirmación es bastante reciente. Hace unos años, estilo y musculación eran dos términos totalmente desconocidos para el concursante de Gran Hermano. Mejor así.
Si nos dicen que ha pasado por las manos de Pelayo en Cámbiame, nos lo creemos. Fuera de apariencias, el hombre se está destapando como uno de los activos más espectaculares del reality. Y sí, además se pasea en calzoncillos. No pasa nada: todos tenemos un pasado.
Menos mal que Suso es como los buenos vinos y mejora con el tiempo. Además, lo demuestra tanto vestido como cuando se quita la ropa. Para comprobarlo: Solo hay que recordar su baño más tórrido en Supervivientes 2016.