Arden las redes, los quirófanos están de guardia. En cualquier momento, Camilo Sesto vuelve a uno de ellos para demostrar que permanece inalterable al paso del tiempo. Eso sí, esta vez puede que se le haya ido un poco la mano. Vivir así es morir de dolor.
El cantante valenciano, de 69 flamantes años, se presentó en ¡Qué tiempo tan feliz! con una inquietante imagen que de inmediato colapsó las redes. María Teresa Campos, refiriéndose a su carrera, se permitió el lujo de llamarle monstruo… Tal vez no era el mejor momento.