Cumple cadena perpetua desde 2012 por descuartizar a su novio y grabarse teniendo sexo con el cadáver. Poco después, se le diagnosticó esquizofrenia y trastorno de personalidad. Y ahora, desde la cárcel, la Gaceta de Montreal se hace eco de unas cartas surrealistas que envía a un amigo.
Así se las gasta Luka Rocco Magnotta, el actor porno gay apodado como el “porno caníbal”, que asegura estar “disfrutando de su vida en prisión”, pues toma el sol, juega al tenis y asiste a fiestas con pizza y chocolate. “Realmente espero que te puedas hacer una casita aquí”, escribió a un amigo en marzo. Y añade: “Voy a rellenar el formulario y te puse en la lista. Voy a ir de compras para la comida y para ver películas. Tenemos canales de películas y cine nocturno aquí, así que puedo conseguir algún título”.
Magnotta confesó haber asesinado a Lin Jun, estudiante chino de intercambio y pareja, al que conoció en una página de contactos. Allí buscaba un “esclavo sexual” para hacer con él lo que le viniera en gana. Y así fue: después de matarlo y desmembrarlo, envió partes de su cuerpo al Primer Ministro canadiense y a dos colegios por correo. Cerca de su casa, la policía encontró el cuerpo de Lin sin cabeza, lo que inició la investigación.
Para entonces, había huido a Berlín, donde fue detenido mientras se recreaba en las noticias que la prensa publicaba sobre su asesinato. “Estoy arruinando mi dieta. Y es que la comida aquí es muy, muy buena y sirven mucho. La italiana es la mejor. También me encanta el helado” . O “estoy deseando que llegue el próximo mes para participar en un torneo de voleibol fuera de prisión. Siempre he sido un jugador increíble. Tenemos un buen gimnasio aquí también para hacer ejercicio. Es muy importante para conseguir los resultados que quiero. Pasé dos horas haciendo deporte y por la noche me voy a dar un paseo por el jardín. Las lilas son mis favoritas”, son algunas de las perlas que deja en los escritos. Muy arrepentido no parece.