Buena persona, barba y barriga. Han tenía claro que su hombre ideal debería cumplir esas premisas. ¿Qué hacemos entonces ahora que Aritz se ha afeitado? Estamos ante el penúltimo drama de la pareja.
Bailes y alcohol, tremenda y explosiva mezcla si tenemos en cuenta su facilidad para discutir. Han vislumbra el nuevo look de su marido y decide no hacerle caso durante la fiesta. “Eres tan superficial que me das asco. Como amigo te acepto pero como persona no me gustas. Me disgusta cómo eres”, clama el vasco al ver la actitud del chino. La historia ya se sabe cómo terminó, entre mordiscos en la cama. Por cierto, ¿qué os parece Aritz afeitado y sin sombrero?