5 motivos por los que Adele es necesaria

1. Hay que saber cantar, pero también vivir y callar

La industria musical es voraz, y si por ella hubiese sido, Adele habría publicado un disco por año desde 2011, documentando cada cumpleaños. Ahí es donde Adele demuestra especialmente su poderío. Publicó 21, triunfó como nadie –vender 31 millones de discos en estos tiempos no está al alcance ni de Beyoncé–, lo presentó en gira y desapareció. Que regrese machacando de nuevo todos los récords imaginables demuestra que el misterio sí sigue vendiendo, aunque sean muy pocos los artistas que apuesten por cultivarlo.

2. No hay que tener miedo a reflejar las vivencias propias

Tiene algo de cliché manido, pero es una realidad inapelable: los artistas que más y mejor llegan son los que se inspiran en sus propias vivencias. Porque la cotidianeidad de cada uno, por muy estrella que sea, es con lo que más fácil resulta identificarse. 19 y 21 fueron discos que documentaron sendas –y dramáticas– rupturas de Adele, y el melodramatismo que destilaban fue clave para enganchar a millones de personas, que probablemente habían pasado –o estaban a punto de pasar por algo similar–.

Hello, ese primer single de 25 que también ha pulverizado todos los récords imaginables en cuestión de días, enlaza perfectamente con el espíritu de esos dos primeros álbumes. Aunque saber que 25 es un disco que apuesta principalmente por su felicidad de estos últimos años es un plus añadido para poder conectar con Adele desde otra perspectiva menos doliente.

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3. Se puede ejercer de diva sin sobreactuar

La espontaneidad que destila en las –escasas– entrevistas que está concediendo para promocionar su nuevo disco demuestra que el éxito no le ha cambiado en lo esencial. Podría haber apostado por compartir una personalidad bizarra y caprichosa como símbolo de su estatus, pero no. La bufona que lleva dentro sigue saliendo regularmente, y sin duda su desafecto por las extravagancias es otro de los pluses que contribuyen a que sean millones y millones de personas las que la admiran y tanto se identifican con ella.

Lo mismo habla de cómo ha tenido que dejar de llevar su cuenta de Twitter para no avergonzarse de sus tuits borracha que de cómo ni sabía quién era Max Martin antes de grabar con él… ¿En serio? Sí, aunque lo afirme todo en tono de broma. Su naturalidad es un arma muy poderosa en estos tiempos en que las discográficas atan muy en corto a las artistas de éxito.

5 motivos por los que Adele es necesaria

Otras dos razones por las que Adele es necesaria, pasa página

4. No es absolutamente necesario vender sexualidad con tus canciones

Es uno de los mayores logros de Adele, quizá no suficientemente valorado. Hoy día, no se concibe el pop mainstream sin una dosis más o menos elevada de sexo como condimento fundamental. Máxime si son cantantes femeninas las que se exponen. De las veteranas como Madonna a las recién llegadas como Ariana Grande, todas procuran abrirse de piernas –literalmente–, lo exija o no el guion –o la canción–.

Adele nunca ha representado un modelo de belleza habitual en las pasarelas o en las portadas, y ni siquiera ahora que se ha refinado y regresa convertida en la indiscutible gran dama de la canción pop actual ha abandonado los looks con los que la identificamos. Ahora más que nunca, que tiene un hijo de tres años, tiene justificación su aspecto de mamma tradicional, y desde luego aparenta mucho más años de los 27 que tiene. No parece estresarle la presión exterior por ajustarse a un canon de belleza preestablecido, y hace bien.

5. Actuaciones, las justas, y con lo justo

Siempre ha declarado Adele que no se ve ella protagonizando una macrogira, con un gran elenco y todo tipo de efectos. Tiene sentido, porque el efecto especial en que basa su carrera es su voz. También asegura que le atraen más las salas pequeñas, las actuaciones íntimas –dentro de un margen–. Y es lo que procura proyectar en las contadas apariciones con que está promocionando Hello.

Tampoco son tantas las artistas que convierten una actuación promocional en un evento de alcance global. Adele sí, y es bueno que apueste por ello también para seguir manteniendo su sello personal incluso a la hora de convencer al público de que debe comprar 25. Aunque no parece que el público necesite que le den más razones para hacerse con él de inmediato.

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