“Respecto al sida, es bueno diferenciar el optimismo del realismo”, asegura el Doctor Bonaventura Clotet. Precisamente, entre estos dos mundos practica funambulismo para desarrollar su imprescindible labor: intentar frenar la enfermedad. Padre de la Fundaciò Lluita contra la Sida y director del Institut de Recerca de la Sida IrsiCaixa, bastan unos minutos con él para tomar conciencia de cómo está la situación a día de hoy.
Valga la palabra esperanza como resumen: “Estamos en estos momentos al principio del final, quedan todavía muchos años, pero se observan que ciertas estrategias podrían ser la clave para poder curar la enfermedad”, sentencia. La creación de una vacuna terapéutica potente, el desarrollo de fármacos que despierten el virus y entender los anticuerpos neutralizantes siguen siendo la obsesión. Sin prisa pero sin pausa, una cruz sigue marcada su calendario: “Sí, 2020 sigue siendo la fecha”.
“Nos gustaría ir más deprisa, pero hay ciertos tiempos que no se pueden obviar”, se lamenta. Cada ensayo, con su correspondiente preparación, puede conllevar hasta dos años de investigación. Imprescindible pisar firme, y la solidaridad del mecenazgo: “Nos permite desarrollar en paralelo distintas estrategias cuyas conclusiones finales serán sinérgicas y nos permitirán avanzar más deprisa”. Y es que, si algo está claro, es que “de todos depende que acabemos con el sida”.
Entremos en materia: el dinero dedicado a investigar la cura del sida en España es 10 veces menor que en Europa, y cada vez hay grupos más potentes que quieren participar, por lo que la porción de pastel es cada vez menor. Su laboratorio es uno de los pocos en el mundo que, de acuerdo con el National Institute of Health (NIH), siguen a rajatabla las líneas prioritarias de investigación sobre las que debería concentrarse la financiación. “Creo que tenemos mucho mérito, porque el presupuesto es hasta cien veces menor que algunas instituciones americanas”, se enorgullece.
“No estoy en contra de la promiscuidad, sí de la frivolidad y el morbo”
Eso sí, solo con orgullo no se reducen las infecciones. Una de sus últimas campañas tiene que ver con el llamado SMS solidario: mandando la palabra ‘epidemia’ al 28099, “el precio de un cortado” (1’20€) irá íntegramente destinado al proceso de búsqueda de la vacuna. “Cada año sigue habiendo demasiadas nuevas infecciones por VIH” y toda ayuda sigue siendo insuficiente. Permiso para coger el teléfono móvil en este preciso instante.
Conocemos la teoría: “Podemos frenar el sida si no hay más contagios, si uno toma bien las precauciones no se va a infectar”. Pero, ¿cómo es posible que todavía mueran “2 o 3 personas” en nuestros hospitales tras contraer el virus? Hagamos bueno el refrán de la venda antes que la herida: “Si todo el mundo que se infecta hace tratamiento, se impediría la transmisión del virus, y por lo tanto se acabaría con el crecimiento de la enfermedad”. Conviene no perder el miedo todavía.
En este sentido, el uso de la profilaxis de pre exposición (PrEP) o las poco aconsejables y tendentes chem-sex parties merecen la opinión de Clotet. La primera de ellas, y su adecuado tratamiento a través de la truvada (un comprimido al día) es aconsejable, pero “tiene que quedar claro que si se toma mal, tampoco sirve, y entonces el virus se puede volver resistente”. Mientras, califica las diabólicas y desinhibidas orgías de “irresponsabilidad extrema. No estoy en contra de la promiscuidad, sí de la frivolidad y el morbo. Quiero pensar que esto tiene mucha notoriedad mediática pero es una minoría la que lo practica”. Cambio de tercio.
Ni qué decir que si hay un colectivo especialmente afectado por el virus y su derivada serofobia, ese es el homosexual. “El mundo gay tiene que tomar conciencia de que puede dar un ejemplo importante en el apartado de las ETS”, explica Clotet, al tiempo que reclama una variación del sistema educativo para implantar una asignatura que provoque unas relaciones más maduras. “El riesgo viene determinado por mucha promiscuidad, lo cual me parece muy bien siempre y cuando se tomen medidas de prevención de enfermedades”, concluye.
Desde su privilegiada y encomiable atalaya, intenta impulsar nuestra conciencia con otros dos proyectos que sumen en su objetivo. La app Epidemia: The Game es el primer videojuego creado para luchar contra el sida y cuenta con Jesús Vázquez como referente. “Una manera muy útil de poder introducir enfermedades como el sida y poder hablar de él, pero…” El objetivo de recaudar un millón de euros se antoja lejano cuando apenas han llegado a las 20.000 descargas. A 0’99€, calculen…
Y la joya de la corona. La 6ª edición de la Gala Sida, que el pasado año batió el récord de recaudación y que esta vez cuenta, además de con Miguel Bosé a los mandos, con Belén Rueda como madrina de honor. El doctor Clotet está encantado con su participación: “Belén es increíble, una gran personalidad y atractiva por su visión y contribución para recaudar y avanzar”. Apunten: 23 de noviembre en Barcelona, unas 24 horas antes del aterrizaje de Madonna en la ciudad. ¿Sería muy macabro pensar que la gran diva pudierar arrimar el hombro solidario como sorpresa? “Nos encantaría un show up suyo, pero no sé nada; se están haciendo intentos pero no sé cómo está el asunto en este momento. Si me entero, os digo…” [risas]. Todos atentos, en todos los sentidos.