“Respeten NIÑAS, lo único que hacen es provocar una situación incómoda en el autobús con su besukiadera”. Una “nota informativa” es lo mínimo que te puede pasar si eres lesbiana y decides cometer el acto abominable de darte un beso en público con tu pareja.
Y así fue. En un autobús de Pamplona, una señora entrega amablemente un escrito a una de las infractoras argumentando que a su vez, otra mujer lo había dejado en el asiento. Un clásico.
En un alarde de coherencia, expresa que “cada uno es libre de expresar sus sentimientos, pero siempre hay que respetar a las demás personas que están en su entorno”, a costa de que no se les ocurra darse un beso.
Fruto de la incredulidad, una de las víctimas decidía subir la foto de la nota en sus redes sociales, aclarando que solo se había tratado de un pico. Una vez más, basta ya de homofobia.