Nuestro chef, que cocinaba delante de nosotros, empezó a preguntar si los clientes habíamos asistido con nuestras parejas. Cuando llegó a nosotras, nos preguntó por nuestros respectivos novios o maridos, a lo que nosotras respondimos que éramos pareja. Él contestó que era algo legal, pero que era un desperdicio no tener un hombre al lado. Luego continuó faltándonos al respeto diciendo que podría venir con nosotras a casa para calentar el asunto. Estamos ofendidas por haber recibido ese trato, no puedo creer haber pagado 50 dólares para ver cómo alguien insultaba nuestra relación.
Mejor explicado que tal y como lo cuenta Ellie Parker en su Facebook, va a ser complicado. Tenemos a un chef asqueroso que se supone que cocina, pero también pretende “calentar las cosas”. La pareja, indignada, tuvo el detallazo de adjuntar en el tique de la cuenta un “no le digas a las lesbianas que necesitan un hombre en San Valentín”. Brillante, igual que la respuesta que ha obtenido esta pareja a través de las redes sociales.