El tiempo, la paciencia y la confianza son elementos básicos a la hora de explorar nuestra sexualidad, y si no que se lo pregunten a Zachary Zane, un hombre bisexual cuya novia le hizo descubrir los placeres de la penetración. En un artículo que escribió para Esquire, Zach confesó que solo había sido pasivo con un chico una vez y la experiencia no había sido nada buena: “Estaba demasiado borracho, me dolió mucho y lo pasé fatal”, tanto que no volvió a intentarlo hasta que su actual novia dio en el clavo. “Después de varios intentos y diferentes posiciones conseguí relajarme lo suficiente para que ella pudiese introducir un dedo. Me puse de espaldas en la cama y comencé a sentirme muy bien. Era como un masaje pero en el interior de mi cuerpo, estaba tan relajado que introdujo otro dedo y supe que aquello podía gustarme mucho”, escribe en su artículo. “Después de un rato empezamos a experimentar con juguetes y tuve orgasmos enseguida, se propagaban por todo mi cuerpo como una descarga eléctrica en lugar de estar localizados. Finalmente lo entendí, era completamente pasivo”.
Zach ha descubierto algo que ha mejorado su bienestar y sus relaciones sexuales, ya sean con hombres o con mujeres. Así que, hombres del mundo, aunque seáis heteros o activos, dadle rienda suelta a vuestra sexualidad y quizá descubriréis una nueva vía de placer.