El actual presidente de los Estados Unidos inicia la cuenta atrás para poner fin a su mandato, y parece ser que quiere apuntarse algunos hitos más en su carrera como político. La última de Obama es su oposición a la polémica Ley de Baños que está sacudiendo Carolina del Norte y Misisipi.
El equipo de Gobierno hará llegar una carta a todos los colegios públicos donde se les pedirá que permitan a todos sus alumnos el uso de los baños acorde con el sexo con el cual se identifiquen. Esta carta no tendrá rango de ley, pero el Gobierno amenaza con dejar de ingresar dinero en los fondos de las escuelas que pasen por alto este aviso, que podrían incluso ser demandadas. La carta hace especial hincapié en la integración total de todos los estudiantes que a día de hoy corren riesgo de ser excluidos por su orientación sexual. Los padres que avisen a profesores o directivos del colegio de la conducta de su hijo, no tendrán que presentar ningún certificado médico o psicológico para que este sea tratado de la forma adecuada por todo el personal del centro.
El gobierno de Obama no solo ha roto una lanza a favor de las personas transgénero con esta carta, sino que también ha demandado a Carolina del Norte y a su gobernador, Pat McCrory, por dar viabilidad a la Ley de Baños.