Un nuevo episodio de homofobia tuvo lugar el pasado 30 de mayo en el pleno del ayuntamiento de la localidad valenciana de l’Olleria.
Todo transcurrió en pleno debate sobre una moción presentada por Compromis sobre los derechos y la normalización LGTB en el municipio, cuando Gema Borras, edil del Partido Popular, afirmó que había que respetar a las personas homosexuales y que por supuesto no están locos, solo que, “tienen trastocadas las hormonas”.
El alcalde de la localidad, Julià Engo, exigió de inmediato a la edil popular que no emitiese juicios de valor: “Le ruego que no haga juicios de valor sobre el comportamiento o la orientación sexual de las personas”. El portavoz del Partido Socialista, Héctor Such, solicitó entonces que las desafortunadas palabras de Borras fuesen incluidas en la transcripción del pleno, pese a la negativa del alcalde.
El comentario ha llegado a odios del Vicesecretario General del Partido Popular, Javier Maroto, vía Twitter. Maroto, abiertamente homosexual, ha indicado que las palabras de la edil valenciana están “absolutamente desautorizas”.