Un ramo de flores y un cartel donde se podía leer “Love Wins”. Eso es todo lo que Felix Glyukman e Islam Abdullabeckov llevaban consigo antes de que fueran detenidos en Moscú por intentar homenajear a las víctimas de la masacre de Orlando delante de la Embajada de Estados Unidos. Cuando uno de los agentes se percató, les obligó a abandonar, con la consiguiente negativa de los protagonistas. “Había un montón de gente con muchas flores, pero el policía nos dijo que nos fuésemos y, al decirle que no, nos metió en el coche”, explica Felix en SBS.
Pese a que las autoridades hablan de “ofensa administrativa”, el caso llama especialmente la atención (aunque nada debería sorprender en la homófoba Rusia) porque el propio Vladimir Putin mandaba el pasado lunes un mensaje de condolencia a Barack Obama por el “crimen bárbaro”. Sería conveniente que revisara la igualdad de derechos para el colectivo LGTB en su propio país.