Un hombre ha sido arrestado en China acusado de intentar asesinar a su bebé por ser intersexual. Después de que el padre del bebé se percatara de que el pequeño, con apenas un mes de vida, no solo tenía una vagina sino también un pene, intentó acabar con su vida asfixiándolo con una toalla húmeda.
Tras escuchar los llantos de la criatura, su madre, Yang Xiaoqing, se dio cuenta de la acción de su marido e intentó persuadirlo para que no lo hiciera. Tres días más tarde, el susodicho volvió a la carga, pero esta vez intentó asfixiarlo mediante unos pañales y una manta. En esta ocasion, Xiaoqing avisó a la policía. “Pensábamos que teníamos una niña, pero pronto nos dimos cuenta de que en realidad era un niño. Entramos en pánico y nos preocupamos mucho”, comentó la madre. También añadió que tras preguntar a su cónyuge por qué quería acabar con la vida de su hijo, estele espetó que “no es ni una niña ni un niño, es un monstruo”.
Xiaoqing explicó a los agentes de policía que después del segundo intento de asesinato, su suegro agarró a la criatura y la abandonó a las afueras del pueblo. “No podía soportar la idea de matar a alguien de su propia sangre, así que mi suegro tomó las riendas del asunto”.
Después de estar doce horas desaparecido y sin haber ingerido alimentos, el bebé fue hallado por las autoridades sano y salvo. “Puede que le parezca un monstruo a algunos, pero para mí siempre será mi dulce bebé”, ha declarado la feliz madre.
Llega la XIII Muestra de Cine Lésbico en la Sala Berlanga de Madrid
Las redes sociales se vuelcan con Amor Romeira ante la transfobia de Sonia Ferrer
Las Spice Girls se reúnen y recrean una de sus míticas canciones
