Su rico y variado pasado ha dejado a Malta un legado único. Sus más de 7.000 años de historia justifican de sobra su gran riqueza arquitectónica y cultural, aunque su oferta para el visitante va mucho más allá.
Su capital, La Valeta, fue declarada Patrimonio Histórico de la Humanidad por la Unesco en 1980, y este año celebra el 450 aniversario de la colocación de la primera piedra de la ciudad con un calendario cargado de actividades especiales. Es el prólogo perfecto de cara a las celebraciones de 2018, año en el que La Valeta será Capital Europea de la Cultura.
Malta es también un destino muy apreciado por los amantes de las actividades al aire libre y en el mar. Islas como Gozo –la segunda más grande del archipiélago– y Comino cuentan con escenarios naturales de ensueño para practicar senderismo, rappel, submarinismo, surf y también realizar rutas en bicicleta o a caballo.
Cabe destacar que Malta y Gozo son los mayores destinos de buceo en el Mediterráneo, y sus fondos marinos están repletos de yacimientos arqueológicos, un paraíso escondido que los amantes del submarinismo exploran con placer. Igual que los amantes de los rincones pintorescos no dejan de visitar, al norte de la isla de Malta, el colorido pueblo de Popeye, construido por Disney para la película de los 80 sobre el clásico personaje de cómic. Un atractivo más que evidencia la riquísima oferta de planes que ofrecen estas islas únicas.
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