Emocionados. Así es como nos sentimos ayer durante la entrevista de Miguel Poveda en Chester in Love, el programa presentado por Risto Mejide.
El cantaor flamenco relató lo difícil que le ha resultado vivir siendo de un condición sexual que no es la habitual, y de cómo a día de hoy sigue pagando el pato del rechazo social. La mentalidad intolerante del entorno de su pareja hace que deban vivir en la más absoluta clandestinidad. “Es una cárcel terrible, me gustaría casarme con mi pareja, conocer a sus padres…”.
El drama familiar es algo que arrastra desde su infancia, y es que aunque Poveda vive actualmente fuera del armario, esto no siempre fue así. “Tenía en la cabeza que iba a defraudar a mis padres. Recuerdo que mi padre me dijo ‘está bien, pero aquí no habrá ninguna muestra de amor con ninguna de tus parejas’… Cuando miraba a un chico en el cole en vez de a una chica me torturaba, porque pensaba que tenía algún trastorno, pero yo sentía por los chicos más que por las chicas. Tuve que reeducar a mis padres, hacerles ver que esto es algo normal”.