Si a estas alturas cabía alguna duda de que Suecia es uno los países más avanzados de Europa en materia laboral, llega uno de sus concejales, Per-Erik Muskos, y propone llevar ante el Congreso de su país un proyecto de ley que permita gozar de una hora libre (y remunerada) durante el trabajo. “Hay estudios que muestran que el sexo es bueno para la salud”, asegura el concejal de 42 años de la pequeña ciudad de Övertorneå.
Aunque la moción está orientada a que los trabajadores tengan sexo con sus respectivas parejas –puesto que “la gente no pasa junta el tiempo suficiente en esta sociedad y se trata de mejorar las relaciones”–, no se descarta que puedan llegar a establecerse relaciones sexuales entre compañeros de trabajo. De cualquier forma, “mejoraría el clima laboral”, ya que los trabajadores estarían más relajados, serían más felices y, por lo tanto, más productivos.
Muskos no ve “ninguna razón” por la que su controvertida moción pudiera ser rechazada; sin embargo, tiene flecos por resolver. Por ejemplo, la forma en la que se controlaría que dicha pausa se fuera a aprovechar con finalidad sexual. “No puedes garantizar que un trabajador no se vaya a pasear en lugar de eso…”, reconoce el concejal.
Sus compañeros del ayuntamiento han recibido la propuesta con mucha guasa. Sin embargo, Muskos cree que es un tema a tener en cuenta para apoyar el aumento de la natalidad. Además, argumenta: “Dado que el sexo es una excelente forma de hacer ejercicio con efectos positivos que están documentados para el bienestar de las personas, el municipio podría matar dos pájaros de un tiro”. ¿Sería viable esta iniciativa en España? En Shangay esperamos que sí.