Carlos Marcos, redactor de El País, publicó ayer un entrevista, con el bailarín y coreógrafo Rafael Amargo. En esta entrevista se declara públicamente bisexual. Amargo se ha tirado a la piscina y ha contado un poco de todo, incluso cómo fueron sus primeras experiencias sexuales.
“Empecé a tener mis novias de adolescente. Y luego me enamoré de un profesor. Tenía una admiración tremenda y conseguí llegar al cariño de la piel”. Así el bailarín comienza hablar sobre la que fuera su primera experiencia con un hombre.
Sin embargo, el punto fuerte de la entrevista llega cuando comienza a hablar de la primera relación que tuvo cuando se vino a Madrid. Amargo contó que “fue con un hombre muy influyente en el mundo de las artes. Dormíamos debajo de cuadros de Matisse, Picasso, Gordillo…”. Aunque se niega a decir su nombre, asegura que sigue vivo y fue una persona con la que aprendió mucho, ya que le llevaba por ferias de arte de todo el mundo.
En la entrevista también habló sobre su relación más conocida con Stéphane Rolland, con el que estuvo un par de años en París. El bailarín le define como “uno de los grandes maestros de la costura de la moda”.
Sus padres le llevaron a un colegio del Opus Dei, pero no porque estuviesen de acuerdo con su ideología. De hecho, siempre ha llevado su bisexualidad con sus padres con naturalidad, sin tener ningún reparo en llevar a sus chicos a casa, a los que presentaba como sus “coleguitas”. Asegura que sus padres son personas modernas y tolerantes.
“No me he casado con un hombre porque no lo he encontrado. No lo descarto”. Amargo se ha casado dos veces con dos mujeres (Yolanda Jiménez, madre de sus dos hijos, de 2003 a 2009, y Silvia Calvet, de 2012 a 2013). Se define como “un hombre que ha tenido mujer e hijos y que a la hora de la verdad vive mejor con hombres”.
Rafael Amargo es uno de los grandes bailarines y coreógrafos españoles, y el año pasado recibió la Medalla de Oro al Mérito de las Bellas Artes. Actualmente podemos encontrarle todos los miércoles en Barcelona, y estará en el Teatro de La Latina, en Madrid, con Un chico de revista a partir del 3 de marzo.