Han pasado 20 años desde que Ellen DeGeneres fue portada en la revista Time con el titular “Sí, soy gay”, y la misma declaración en su serie televisiva.
Con esta declaración se convirtió en la primera estrella de TV en salir del armario en horario de emisión. A pesar de las numerosas amenazas, mensajes de odio y una época difícil, consiguió conquistar a muchos simpatizantes, tanto homosexuales como heterosexuales.
El capítulo de Ellen fue un éxito rotundo, y ganó un Emmy al mejor guion, aunque su portada en Time se publicó dos semanas antes. “Se volvió algo más importante para mí que mi carrera”, dijo la actriz y comediante en una entrevista reciente con The Associated Press. “De pronto dije, ‘¿Por qué estoy avergonzada de quien soy, solo para ser exitosa y famosa en los ojos de la sociedad?”.
Las críticas no se hicieron esperar, con insultos tan ‘originales’ como cambiar su apellido por Degenerate (degenerada). Además, la gente comenzó a calificar la serie como “demasiado gay” y a considerarla apta solo para adultos, lo que hizo que perdiera algunos patrocinadores.
Lo que está claro es que Ellen DeGeneres hizo historia.
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