El programa de televisión francés, Touche pas à mon poste, de canal 8, ha recibido más de 17.500 quejas por homofobia. Las quejas se refieren a una sección del programa en la que se hacen bromas telefónicas a algunas personas para grabar sus reacciones. En este caso, la broma iba dirigida a hombres gays.
El programa creó un perfil falso en una página de contactos usando una foto de torso musculado. Este falso hombre se describía como “muy deportista y bien dotado”, y añadía un “me encanta que me insulten”.
El presentador, Cyril Hanouna, se hizo pasar por el supuesto hombre, haciendo gestos amanerados y afeminando su voz, y llamaba en directo a los hombres que habían mostrado interés en el perfil, para ridiculizarlos en la conversación.
Varias organizaciones LGTB, junto con numerosos espectadores, han denunciado el contenido homófobo ante la CSA, un organismo público encargado de regular la emisiones de radio y televisión en Francia para preservar el respeto de los derechos de personas y colectivos. La asociación Le Refuge, que ayuda a jóvenes que han sido víctimas de LGTBfobia, considera que la broma daba “una imagen degradante de las personas homosexuales reduciéndolas a una caricatura”.
El presentador ha asegurado que la ‘broma’ no tenía ningún carácter homófobo. Sin embargo, durante el programa se llevó a cabo una interpretación estereotipada y plumófoba por parte de Hanouna, con la complicidad de unos colaboradores que no paraban de reírse. Además, durante el desarrollo de las llamadas, las víctimas de las que se burlaba revelaron información personal ante más de un millón de espectadores sin ser conscientes de ello.
La CSA deberá ahora analizar el contenido y decidir si merece algún tipo de sanción.