Una reedición que cuenta con la bendición de Miramax, que en su día le hizo eliminar ciertas escenas homosexuales, como una en la que Ryan Phillippe se besa con Breckin Meyer, su compañero de reparto en la película.
La controvertida escena se filmó en 1998, pero como el film estuvo lleno de grabaciones, regrabaciones y reediciones, no supimos del beso hasta que en 2009, el escritor y director Mark Christopher dio a conocer 45 minutos más de metraje de la película. La escena se filtró en la red pero la productora se encargó de hacerla desaparecer.
La película sobre el famoso club de Nueva York vio la luz en el verano de 1998. Studio 54 relataba la historia del club neoyorquino de moda en los años 80, y de cómo Shane, su protagonista, se introducía en el mundo de la noche trabajando como camarero ‘fashion’ en el 54. Un continuo flirteo entre fiestas, drogas y sexo.
Una historia protagonizada por un espectacular Ryan Phillippe de 24 años, que nos hizo soñar a todos con ser algún día camareros de un club nocturno y vivir la vida explotando las experiencias al máximo.
Aunque a sus 40 años parece que el actor no ha perdido la forma, así lo comprobabamos en otro artículo reciente: Ryan Phillippe, sin camiseta y mejor que nunca.
Pero poco tenía que ver ese 54 de Mark Christopher de 1998 con el que ahora, casi 17 años después, finalmente saca a la luz, completando así la versión de Studio 54 que había escrito para mostrar en su día y que Miramax, propiedad de Disney por aquel entonces, ordenó censurar eliminando 40 de los 106 minutos de película, así como 30 minutos de nuevas escenas que se pretendian incorporar. Estos dos cortes fueron tan drásticos y relevantes en la historia del film que Dolly Hall bautizó el metraje de la censura como el «Studio 55».
«Nunca vi una reedición tan radical en ninguna otra película que he hecho», afirmaba Phillippe. «Los personajes cambiaron tanto que no tenían nada que ver con el guion original”.
En los años transcurridos desde que salió la película, las versiones piratas con el corte original de Christopher han circulado ampliamente por la red, siempre perseguidas por la productora, y convirtieron Studio 54 casi en una película de culto, en un ‘clásico perdido’ del cine gay.
Pues bien, ahora tendremos la oportunidad de ver la versión sin censuras el próximo otoño en Berlín, así como su lanzamiento en versión digital a finales de año.
«Este tipo de recuperaciones no sucede», dice Phillippe, «especialmente para una película que no fue bien acogida por la crítica”.