Ana Guerra, ¿la nueva diva gay española?

REINVENCIÓN EN TIEMPO RÉCORD

Poco o nada queda de la Ana Guerra que cantaba con Mimi aquella irregular versión del Don’t You Worry Bout A Thing de Stevie Wonder en la gala 1 de OT 2017 y que le valió para ser una de las dos primeras nominadas del talent show. Un toque de atención que le sirvió para ponerse las pilas ante un grupo de compañeros que llegaban a la Academia con los deberes muy bien hechos. No es la que mejor canta, ni tampoco la que mejor puede bailar (pese a que muchos de sus compañeros tengan pendiente la asignatura del baile), pero Ana Guerra ha sabido cómo sacarme el máximo partido así misma, sorteando con desparpajo suficiente todos los retos que se ha ido encontrando durante el concurso. Dicen que ‘querer es poder’, y a la War le sobran ganas de comerse el escenario y aprender. Muchos la posicionan ya dentro de los finalistas, algo totalmente admirable si tenemos en cuenta que en la primera semana del programa, estuvo a punto de abandonar la Academia. 

¿Sax o Cabaret?, ¿cuál es tu número favorito? 

PROTAGONISTA DE GRANDES NÚMEROS

No es que la nueva edición de Operación Triunfo destaque por la mercadotecnia de sus directos, pero las pocas presentaciones dignas de aplaudir han sido firmadas por la canaria. Si en La Bikina el escenario del programa se convertía en una fiesta mexicana con mariachis y todo, en Cabaret no faltó el atrezzo para presentar una versión digna del musical del que proviene la canción. Mención aparte para el número de baile que se marcó durante Sax (llevando a la histeria al público) y que le valió para ser la favorita del público de esa semana. Pocos apostaban por ella y ha resultado ser todo un ejemplo de superación.

¿Cómo se denominan los fans de Ana War? 

FANS POR MINUTO

Sí, todos sabemos lo bien que canta Aitana y lo especial que es Amaia, pero ya demostraron todas sus dotes en las primeras galas del concurso. Muchos fans del programa han ampliado el cupo de sus favoritos para incluir a Ana Guerra. Como hemos comentado en páginas anteriores, su evolución es el claro ejemplo de lo que busca hacer Operación Triunfo con sus concursantes; coger diamantes en bruto para pulirlos y sacar lo mejor de ellos, y seguro que Guerra aún no ha tocado techo y nos dará alguna alegría más en las semanas finales del talent show. Su legión de fans, llamados warriors, no dudaron en asistir a la firma de discos en la que estuvo la cantante hace semanas para mostrarle todo su apoyo (y hacerle creer que su versión de La Bikina era Top 3 en las listas mundiales de Spotify). Su versión de la canción que popularizó Luis Miguel, entre otros, supuso el pistoletazo de salida para el fénomeno Ana War. Tanta ha sido la acogida que está teniendo la canaria, que consiguió hace unas semanas destronar al trio Amaia-Alfred-Aitana como favoritos del público.

¿Cuáles han sido los momentos más LGTB de la concursante?

APOYO AL COLECTIVO LGTB

Mucho antes de que se convirtiese en el fenómeno viral que se ha convertido la fiebre Warrior, Ana Guerra ya despuntaba por comentarios como los que le hizo a un Cepeda que pensaba que iba a perder masculinidad frente al público por besarse con un chico. No es este el único momento en el que la canaria ha apoyado la visibilidad LGTB en el concurso, jugando a casi besarse con su compañera Mimi encima del escenario o dejando que letras como la de la canción ‘Lagrimas Negras’ se queden tal y cual están en su versión original, pese a que esté dedicada a una mujer. ¡Bravo por Ana War!

Preciosa y orgullosa, así luce Ana War

IMAGEN PERFECTA

Siendo un poco frívolos y dejando a un lado lo méramente musicalmente, cabe recordar que diva gay hace alarde de una imagen perfecta, y Ana Guerra puede presumir con orgullo de tenerla. Cuerpo esbelto donde las haya, la cantante luce con gracia lo que le pongan los estilistas del programa (que patinan bastante en cada gala). Pelo rizado, cardados y tupés, todo le queda bien. Si su carrera artística sigue el curso que todos esperamos, no queremos ni imaginar lo que podrá dar de si la imagen de War con un buen equipo de estilistas detrás.   

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