Ryan Murphy (Glee, Feud, AHS) está imparable. Con la última temporada de American Horror Story recién finalizada y su serie sobre el asesinato de Gianni Versace a punto de estrenarse (lo hará el próximo 17 de enero en el canal norteamericano FX, pese a que la familia del diseñador no haya dado el visto bueno a la ficción), Murphy tiene ya nuevo proyecto en mente, esta vez más ligado que nunca al colectivo LGTB, ese al que tanta visibilidad ha dado en todos sus trabajos. Con esta premisa nace Pose, la nueva ficción del norteamericano, que narrará las aventuras (y desventuras) de la comunidad LGTB neoyorkina de los años ochenta, haciendo especial hincapié en la escena voguing que tan de moda estuvo en aquella época dentro del colectivo y las competiciones de este estilo de baile tan queer (más conocidas como balls). Podriamos decir que, salvando las distancias, esta serie podría ser la versión extendida del famoso Paris Is Burning.
Murphy, que contará con la ayuda de Brad Falchuk y Steven Canals en este nuevo proyecto, pretende estrenar la primera temporada de Pose (que contará con ocho episodios) durante el verano del 2018, ya en producción tras la aprobación de FX. La importancia de esta serie no queda solamente en su trama y la visibilidad que acarreará, pues será la ficción televisiva con el mayor elenco de actores transexuales de la historia de la televisión, sumando en su totalidad más de 50 personajes LGTB. Un casting de más de seis meses que encabezan las actrices Dominique Jackson, MJ Rodriguez, Hailie Sahar, Indya Moore y Angelica Ross. La trama, a grandes rasgos, mostrará cómo el inicio del imperio Trump contrastaba con un colectivo LGTB marginado socialmente que daba rienda suelta a sus sueños en locales clandestinos a través del voguing. En estas competiciones de baile ellos se mostraban tal y como siempre soñaron. Auténticas reinas reprimidas por una sociedad que no las entendía. Feminidad exagerada y desafío de los roles de género para olvidar cada noche una vida marginal y precaria, en la que solo buscaban igualdad para ser una parte respetada de la sociedad que les rodeaba. Un gran hito para el colectivo LGTB, especialmente para una parte tan maltratada históricamente como lo han sido las personas transexuales, que gracias a gestos como este consiguen una visibilidad e integración que antes, por desgracia, nadie les dio. ¡Gracias una vez más, Murphy!