Laverne Cox, conocida mundialmente por su papel dentro de la serie Orange Is The New Black, se ha convertido desde su salto a la fama en todo un icono dentro del colectivo LGBTI, especialmente para los transexuales, que han visto como Cox ha roto muros que parecían infranqueables, sobre todo para los malos tiempos que corre la comunidad trans en plena era Trump. Sus logros no se reducen a representar el papel de mujer transexual dentro de la popular serie de Netflix, pues la actriz ya fue portada de la prestigiosa revista Time en el año 2014 –la primera mujer trans que protagonizaba una portada de esta publicación–, donde tuvo ocasión de hablar del suicidio al que ella misma estuvo a punto de sucumbir con tan solo once años y que refleja una de las mayores problemáticas que, a día de hoy, sigue sufriendo esta parte del colectivo LGTBI tan maltratada social y jurídicamente.
Cox sigue imparable en su visibilización, y ya pudimos verla hace meses siendo modelo de la campaña de Ivy Park, la marca de ropa de Beyoncé. Es cierto que ya había sido protagonista de varias sesiones de fotos para las revistas de moda conocidas, pero su verdadero logro ha llegado al convertirse en la primera mujer transexual que protagoniza una portada de la revista Cosmopolitan. “Soy una mujer transexual negra y estoy viviendo un sueño”, afirma Cox en la entrevista que se podrá leer en el número de febrero del magazín. Y no es para menos. Para muchos, todo lo que está consiguiendo esta valiente mujer era algo impensable hace muy pocos años. ¡Bravo, Laverne!
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