La canción que se ha convertido en el buque insignia de su nuevo álbum, Fuego, y en un imprescindible del repertorio de La Bien Querida, acaba de estrenar videoclip. Hablamos de Dinamita, un tema agridulce pero esperanzador que marca esa vuelta al pasado y viajes al futuro que inunda el nuevo trabajo de la bilbaína. En el vídeo, dirigido de nuevo por Juanma Carrillo, encontramos a una adolescente que comienza a descubrir el amor hacia una compañera y siente una fuerte atracción por la propia cantante. Todo ello con referencias cinematográficas a Andrei Tarkovsky o Las vírgenes suicidas de Sofia Coppola, además de un claro mensaje de ruptura con lo establecido, lo tradicional y arcaico, que anima a buscar un camino propio. Tal y como explica el director:
“¿Se puede desear conocer el mundo desde un rincón perdido del universo?. Desde el primer momento que escuché Dinamita me imaginé la escena inicial, visualicé a una adolescente acosada por la pubertad, las dudas y un padre autoritario y severo. La idea de una niña saliéndose de una fila de adultos recta y escapando por una puerta bañada de luz invadió mi cabeza durante meses. Tenerlo claro es algo bueno, pero también es doloroso y complicado visualizar algo durante tanto tiempo, te pone las cosas más difíciles. Por ello, cuando vi que esa imagen cobraba forma real junto a una de mis apuestas, la joven Alejandra Bittini, y el complejo decorado, no me lo podía creer. Dinamita es una canción de amor, un canto a la libertad y el romanticismo, por ello, aunque una de las referencias claras que llevaba rondando desde hace varios vídeos era la pureza adolescente de Las vírgenes suicidas de la joven Coppola, y mi obsesión desde la trilogía por los complejos encuadres de Tarkovsky, no debía dejar que la oscuridad que tanto me atrae, venciera a la luz que impregna toda la canción. Por ello, también tenía claro que un final feliz, aunque abierto, se imponía y nuestra protagonista debía sugerirnos a todos la idea de salir afuera, de buscar nuevos caminos y de no tener miedo a saltarnos las normas y tradiciones que nos impone cada día la sociedad en la que nos ha tocado vivir”.