Un nuevo reto se presenta para el actor en Bajo la piel de lobo, un film con apenas diálogo donde interpreta a un ermitaño asalvajado con el que vuelve a experimentar un imponente cambio físico.
Mario Casas es uno de los actores más versatiles que tenemos en nuestro país. Lo hemos visto pasar por diferentes etapas como actor a lo largo de su vida, así como en diferentes versiones de él mismo al cambiar tanto de imagen para adaptarse a sus diferentes proyectos. Lejos quedó aquel chico con greñas que veíamos en SMS para dejar paso a un Mario con el pelo corto o rapado, incluso con una voluminosa barba.
Su último proyecto parece que es el que más cambio físico le ha requerido hasta el día de hoy. Se enfrenta a uno de sus papeles más dificiles poniéndose en la piel del fotógrafo catalán Francisco Boix, preso de los nazis. La pelicula ya está en proceso de rodaje, y Mario ha perdido entre 12 y 13 kg para interpretar a un hombre que, además de retratar la Guerra Civil Española, también presenció las torturas en los campos de exterminio nazis.
En la fotografía vemos a Mario rapado, muy delgado y con las facciones de la cara más marcadas que nunca. Ha sido él mismo quién ha compartido la imagen caracterizado como Francisco Boix con sus seguidores. Muchos de ellos han comentado su increíble cambio físico, le han felicitado por la implicación con su trabajo y le han deseado que la película sea un éxito. Todos estamos esperando volver a ver a Mario en la gran pantalla pero, por suerte, ya nos queda menos.