Emma González, de 18 años, se ha convertido en una de las activistas estadounidenses más reconocidas tras su discurso del pasado sábado donde homenajeó a todas las víctimas del tiroteo de Parkland (Florida), al que ella sobrevivió. La joven lideró el movimiento March for Our Lives, una multitudinaria manifestación que tuvo lugar en todas las grandes ciudades estadounidenses y con la que se exigía regular la venta de armas en los Estados Unidos.
González subió al escenario de Washington y conmovió con sus palabras (y su silencio) a las miles de personas que atentamente la escuchaban. Puso el temporizador de su teléfono móvil y comenzó a hablar. Habló de lo que sintió ella en el momento del tiroteo pero también de las víctimas, a las que puso nombre y apellidos. Ella estaba emocionada pero todos los que la escuchaban aún más. En un momento de su discurso, se calló. Permaneció en silencio hasta que la alarma de su teléfono sonó. Seis minutos y veinte segundos, el tiempo que duraron los disparos en su instituto. Seis minutos y veinte segundos que fueron eternos.
La joven, que aparece en la portada de la revista Time del mes de abril, no ha dudado en hablar públicamente de su bisexualidad. De hecho, ha afirmado que la aceptación de su orientación sexual le ha ayudado a defender de forma tan activa las causas en las que cree. “Las dos cosas van unidas. Si no fuera tan transparente cómo soy nunca habría sido capaz de hacer lo que he hecho. En noveno curso, estaba en una clase de escritura creativa donde logré expresar lo que realmente estaba sintiendo y me ayudó especialmente a aceptar quién era. Ahí fue cuando me acepté y empecé a decírselo a la mayoría de la gente”.
“Aceptar mi bisexualidad me ayudó a entender que todos, da igual quiénes sean o qué aspecto tengan, pasan por malos momentos”.
Emma González, además, ha aplaudido la labor del grupo activista homosexual Gays Against Guns, que lucha por poner fin a la compraventa de armas en EE UU, y ha confesado que una de sus mayores inspiraciones es Sylvia Rivera, la activista LGTB que participó en los disturbios de Stonewall.
Es increíble que alguien tan joven como Emma tenga tanta fuerza y sepa usarla para algo tan necesario.