Ayer mismo, Álvaro subía una foto a Instagram dándose un beso con su novio, Jaime. Una de las muchas que ya tienen juntos en esta red social. Este selfi fue incluso algo más tímido, ya que no llegan ni a rozarse los labios, pero igualmente bonito. No había nada en la foto que aparentemente pudiera ofender a ningú ser humano. Sin embargo, según explica uno de ellos, la publicación fue denunciada e Instagram decidió eliminarla por considerarla “inapropiada, y atentar contra los derechos comunitarios”. Todo muy normal, sí.
Álvaro, sin entender mucho el motivo de la censura decidió gritarle al mundo lo que había ocurrido (y lo mucho que quiere a su pareja). Denunció esta injusticia en todas sus redes sociales, incluso en el propio Instagram, donde utilizó sus stories para contar lo sucedido. “¿Me explicáis en qué vulnera esto las normas?”, escribió molesto. “Igual estaría bien que revisarais la misma y analicéis si vulnera o no o atenta contra la sensibilidad”, continuó. “En todo caso, estáis vulnerando mis derechos y atentando vosotros contra la igualdad”.
También utilizó su cuenta de Twitter para explicar a sus casi cuarenta mil seguidores lo que había sucedido minutos antes, y la respuesta que recibió fue increíble. Más de 140.000 personas dieron “me gusta” al tuit en señal de apoyo y casi 52.000 usuarios compartieron la publicación. Recibió cientos de comentarios que aplaudían la actitud de Álvaro y de su pareja, y muchos otros que se quejaban del mal uso de Instagram. En definitiva, nadie comprendía por qué habían eliminado la foto y, la verdad, es que resulta incomprensible.
Dos personas vestidas, a plena luz del día, mirándose cariñosamente y a punto de darse un beso. ¿Qué tiene de malo esta publicación? Absolutamente nada.
Es por ello que la pareja no lo dudó demasiado y decidió subir la instantánea de nuevo a Instagram. “Y que no se olvide nadie: amar es amar independientemente de la condición sexual. A ver si la volvéis a denunciar por inapropiada”.
Es maravilloso ver cómo Álvaro y Jaime, lejos de esconderse, deciden volver a publicar la foto y lo hacen con más ganas si cabe que la primera vez; que saquen lo positivo de todo esto y que reivindiquen una igualdad que, aunque a veces parezca increíble, todavía no es real.