Que a Nacho Duato le gustan los desafíos está fuera de toda duda. Incluso al inicio de nuestra conversación telefónica nos instaba a ponerle a prueba: “A ver, que llevo ya tres entrevistas seguidas y todos me preguntan lo mismo…”. Así es el carácter del deslenguado coreógrafo, cuya vuelta en forma de colaboración a la Compañía Nacional de Danza, entidad que dirigió de 1990 a 2010, es uno de los grandes acontecimientos culturales de nuestro país. Ocho años de ausencia repartidos entre Rusia y Alemania –al frente del Teatro Mijáilovski de San Petersburgo y el Staatsballett de Berlín– para un reencuentro al que Duato resta trascendencia. “Nunca he tenido cosquilleos, me lo tomo como un estreno más, aunque sea en el lugar que ha sido mi casa durante veinte años. Me apetece, veo los ensayos bien y me siento muy querido y respetado”.
Por vos muero, una de sus piezas más aplaudidas y creada originalmente para la Compañía, es la elegida para su comeback en su anhelado Teatro de la Zarzuela, donde compartirá programa con coreografías de Itzik Galili y Jirí Kylián. Un tributo al Siglo de Oro español con textos de Garcilaso de la Vega relacionados con la danza, el amor y la muerte –Por vos nací, por vos tengo vida, por vos he de morir, por vos muero–, cuando “se bailaba por el puro placer de bailar, en lugares como la corte, la plaza del pueblo o los entierros, y sin coreografía. Y nada de títulos tenebrosos, que últimamente la gente se come mucho el coco; he querido recrear el pasado con un vocabulario contemporáneo”, explica.
Tras su polémica marcha, da la sensación de que es el momento idóneo para desbloquear esa guerra fría y agridulce que se generó después de que el Ministerio de Cultura no valorara su trabajo: “No me sentí maltratado, ni me enfadé. Me quedé triste, por lo brutos y zopencos que fueron al decirme que me tenía que ir. El ministro ni siquiera se había leído mi contrato…”, se sincera. No deja pasar la ocasión para recordar una de las anécdotas que aliviaron su dolor. “¿Sabes? Al mes de empezar en el Mijáilovski vinieron a verme los reyes. La reina Sofía me dijo: ‘Nacho, qué pena que te hayamos tratado tan mal en España’. Y no creo que ella me siguiese, pero algo sabía. El rey me dio las gracias por hacer patria, y al decirle que aún no tenía el contrato de trabajo lo solucionó al día siguiente. Pese a eso, espero que haya República y que lo pueda ver”.
Duato aparca rencor y nostalgia para hablar de una de las razones más poderosas en su vuelta, mucho menos rebuscada de lo que se pudiera imaginar: “Estaba hasta la coronilla de Alemania, por no decir hasta el coño. Es una sociedad muy calculadora, no son 88 millones de habitantes, sino 88 millones de policías. Siempre diciéndote lo que no hay que hacer… Qué alegría poder andar por Madrid entre sonrisas, y aunque no me quisiera nadie”. Llama la atención que Alemania le traiga peores recuerdos que Rusia, donde su leyes homófobas hacen pensar que no es fácil vivir allí siendo foráneo y abiertamente gay. “Pero yo sé hacer ballet, no buscar novio ni montar un bar gay. Piensa que son homófobos, pero también misóginos y racistas. Lo que pasa es que con un par de vodkas se relajan y sacan su gran corazón. Adoran el arte y la oratoria. Putin, con todo lo que es, vino a dos estrenos con sus guardaespaldas, estuvo bebiendo vino con los bailarines y nos dimos la mano”.
Con la mente reseteada, solo aparca su fina ironía para reclamar el lugar que la danza merece. Madrid es la única capital europea sin una compañía estable, y Duato no puede ocultar su pena por ello. Sin embargo, lejos de querer volver a ostentar un cargo público, sí que encabeza la cruzada para que salga adelante una Ley de Mecenazgo –“con tanto millonario que hay ahora… No sé si hacerme diputado como Toni Cantó”–, que le permitiría cumplir uno de sus objetivos más inmediatos: “Regentar un teatro de aquí a pocos años, pero sin alfombras, lagrimones de cristal y palcos dorados. Un buen escenario con buenas luces donde se pueda bailar. Y nada de llamar a Calatrava, por favor, que diseñó la Ópera de Palma con una puerta de carga y descarga como la del baño de mi casa”. Genio y figura.
POR VOS MUERO SE REPRESENTA EN EL TEATRO DE LA ZARZUELA DENTRO DEL PROGRAMA KYLIÁN/GALILI/DUATO DE LA COMPAÑÍA NACIONAL DE DANZA HASTA EL 10 DE JUNIO