La adaptación al cine de la novela homónima de Becky Albertalli supone un importante avance para la representación del colectivo LGTB. Con amor, Simon, dirigida por Greg Berlanti, supone la primera producción de un gran estudio cinematográfico (20th Century Fox) en contar con un protagonista gay y en centrar su trama en lo que supone salir del armario en la vida de un adolescente en la actualidad.
El actor Nick Robinson (Jurassic World) es el encargado de ponerse en la piel de Simon Spier, un estudiante de secundaria que aún no se ha atrevido a hablar abiertamente con su familia y amigos acerca de su orientación sexual. Sin embargo, la curiosidad le lleva a compartir correos anónimos con otro chico gay de la ciudad, una relación que le hace sentirse bien y supone un soplo de aire fresco en su vida, ya que a través de esos emails consigue ser quien realmente es, sin secretos ni mentiras. Cuando parece que todo está en orden en el día a día de Simon, la filtración de estos mensajes le pone entre la espada y la pared, y se ve obligado a hacer pública su homosexualidad. Un paso valiente que conlleva ciertas consecuencias en la vida de Simon, las mismas que van marcando el rumbo de la película.
Jennifer Garner (Dallas Buyers Club) y Katherine Langford –conocida por ser la protagonista de otra dura historia sobre el bullying, la serie Por 13 razones– son algunos de los nombres que completan el reparto de esta importante y necesaria historia que, aunque recrea momentos emotivos y duros vividos por gran parte del colectivo LGTB, los aliña con acertados toques de humor que la convierten en una eficaz comedia juvenil. Una película que significa tanto o más por lo que representa que por lo que cuenta. Un valor que puede que la lleve a ser uno de los grandes títulos de este 2018, y que esperamos abra las puertas de un nuevo cine en Hollywood, en el que todos los colectivos puedan tener representación más allá de personajes secundarios.