Un renovado David Guetta en ‘7’: “Lo mágico es que en mis conciertos haya gente pobre, rica, gay, hetero, negros, blancos…”

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Vaqueros, permanente sonrisa y perfecto español (esto último gracias a sus temporadas en Miami y su novia cubana, tal y como él mismo confiesa). Así aparecía David Guetta, tal vez el DJ más importante de la historia, en una azotea de Madrid desde la que enseñaría al mundo mucho más que 7, su nuevo álbum, sino una renovada apuesta que se extiende más allá de la lámpara mágica de donde siempre saca sus jitazos rompepistas. Su reinventado trabajo, donde no faltarán colaboraciones con grandes divas y estandartes, deja la presentación de su alias Jack Back, su versión más deep y underground, términos que el francés también pretende reorientar. “Soy DJ, y siempre quiero haceros bailar, pero también busco siempre una manera nueva de que ocurra”, explica el mito, consciente de que cada uno de sus movimientos tiene especial trascendencia. Como también la tendrá su primera inclusión en el mundo de la música urbana en nuestro idioma de la mano de J Balvin, que deja una interesante (y tardía) anécdota. Un Guetta alejado de la esclavitud de los números que solo piensa en ser feliz. Y que todos, independientemente de su raza, estatus, o condicional sexual, lo sean con él. 7 parece haber contribuido. Aquí alguna de sus claves.

Guetta y lo latino

Para que te quedes, uno de sus dos temas junto a J Balvin, es la primera canción que graba íntegramente en español en toda su carrera. Un acercamiento novedoso hacia el reguetón, que estuvo cogiendo polvo en el armario, un hecho del que ahora se arrepiente. «La hicimos hace 3 años, antes de toda esta moda urbana y el reguetón. Estaba en un momento de dudas, sin saber muy bien qué hacer. Cuando empiezas todo es pasión, pero cuando llegas a la cima, siempre está el miedo a caer. Me encontraba un poco en ese momento, y me puse a trabajar con gente que hablaba en español, aunque hubo gente que no lo entendió. Y ahora mira, guardé el tema y me siento un poco tonto [risas]», explica.

Guetta y las colaboraciones

Justin Bieber, Sia, Marin Garrix, Steve Aoki… La lista de invitados sigue siendo tan lustrosa como siempre, aunque Guetta deja alguna colaboración fuera de lo habitual, que marca claramente sus nuevas intenciones. Para muestra, ese Drive con Black Coffe. «Es una de mis preferidas en el álbum. La cosa es que querían hacer música conmigo, vinieron a Los Ángeles a saludarme, y surgió. Y es lo contrario a lo que sucede hoy en día con Internet, donde la gente trabaja a distancia, y eso me ha gustado mucho porque fue magia. En un día, lo hicimos. Y fue muy interesante la pelea entre mi producción y su toque underground; yo quería más y ellos menos, pero ha quedado genial».

Guetta y Jack Back

El olfato pop del francés está fuera de toda duda, así que en 7 ha querido ir un paso más allá en lo que a sus aspiraciones se refiere. Ahí aparece su a.k.a imprevisible Jack Back, sobrenombre bajo el que pinchará lejos de lo comercial y con el que está dispuesto a perder dinero a cambio de sentirse realizado. Prueba de ello es que le otorga todo el protagonismo del segundo cd del álbum. «Quería hacer esta distinción en el disco y para el futuro. Porque cuando la gente paga una entrada para ver a David Guetta espera el I got a feeling, When love takes over, Sexy bitch… Estoy aquí para hacerles felices. Con el nuevo alias, cuando haga un show con él, se sabrá que no voy a pinchar los hits y haré un tipo de música diferente. Seguiré siendo yo, pero será distinto. Creo que puedo hacer de todo, y es lo que me gusta. En este momento estoy pinchando mucho este estilo, especialmente en Ibiza, y me encanta. Así que vamos a ver más de Jack Back pronto…», añade con entusiasmo.

Guetta y la diversidad

Camino de los 50 años, ya tiene suficiente experiencia como para echar la vista atrás y pensar en su legado. Tampoco le queda mucho más que demostrar, así que resume su vida musical con un mensaje inclusivo tan interesante como cierto. Quien no haya bailado uno de sus hits, que levante la mano. «He hecho house durante años, pero siempre he querido hacer otras cosas. Canciones que vayan más allá de las modas, y que supongan un reto. También quiero hacer cosas solo para divertirme, sin la idea comercial ni el objetivo de ganar dinero o que suenen en la radio. Música para pequeños lugares, pero para mí es muy importante utilizar mi fama para educar más allá de los hits. Y sin separar, hago música para que estemos todos juntos, lo mágico es que en mis conciertos haya gente pobre, rica, gay, hetero, negros, blancos… Y todos somos uno. Y eso es lo que quiero hacer con mi vida y mi música».